SANTA FE-ARGENTINA (por Rodolfo O. Gianfelici, PrensaMare) La crisis en Ucrania ha ‘regalado’ al mundo otra muestra más de cinismo e hipocresía occidental, con una naturalidad que hasta resulta extremadamente burda.
Las clases dirigenciales occidentales, lideradas por EEUU y las potencias europeas han lanzado una verdadera campaña de rusofobia, que ni siquiera habíamos llegado a conocer en los peores tiempos de la llamada ‘guerra fría’.
Los medios de comunicación e internet se han transformado en instaladores de un discurso único, que causaría orgullo (pero también asombro) al mismísimo Joseph Goebbels. Inclusive apelando a la censura gritada a los cuatro vientos, en nombre de la... libertad informativa.
Leer las ‘noticias’ contra todo lo que pueda tener relación con Rusia, resulta increíble. Máxime que se trata de las mismas clases dirigenciales y medios de comunicación que en estos mismos días: ignoran, silencian, censuran u ocultan el racismo y criminalidad de Israel en contra del pueblo palestino; de EEUU, Israel y la UE contra el pueblo libio; de EEUU, Marruecos, Israel y la UE contra el pueblo saharahuí; de Aarabia saudí, sus socios, EEUU, Israel y la UE contra el pueblo yemenita; de EEUU, Israel y la UE contra el pueblo sirio...
Sin olvidar el sufrimiento de colombianos, ecuatorianos, peruanos, indúes, sudaneses, egipcios, haitianos, portorriqueños, mexicanos, guatemaltecos...
El reciente gran-montaje-gran, fue el de aprovechar Eurovisión 2022, para sacarle el máximo provecho político. Meses atrás la maquinaria ideológica estadounidense había organizado un ‘festival solidario’ en la colombiana Cúcuta. Una maniobra para golpear mediática y musicalmente al gobierno venezolano de Nicolás Maduro, que terminó convirtiéndose en un escándalo de corrupción.
Desde Eurovisión le otorgaron el ‘triunfo’ a la banda Kalush Orchestra con su tema "Stefania". Seguramente occidente consideró que los ucranianos merecían ‘ganar’ porque ello sirve moral y mediáticamente.
Entonces, actuaron en consecuencia; no olvidando que el mismo evento musical había decidido excluir a Rusia del concurso.
Luego de actuar, el sexteto pidió: "¡Ayudad a Ucrania".
Este resultado -supuestamente musical-, ha estado totalmente ideologizado de una manera tan canallezca, en un nivel tan exagerado, que por ello mismo (al ser tan increíble), pasa por... normal.
Lo cierto es que Eurovisión otorgó un premio a cambio de las muertes de los ucranianos; a cambio de la criminalidad e irresponsabilidad de su presidente Volodimir Zelenski (ansioso por contentar a Washington, Bruselas y Tel Aviv); a cambio de la prolongación del conflicto; a cambio que los enfrentamientos se mantengan a una buena distancia de kilómetros de Washington, París, Tel Aviv, Roma, Berlín y Madrid...
Aclaración...
Para otorgarle el ‘triunfo’ al grupo musical ucraniano, los organizadores de Eurovisión... manipularon los votos (¡). Desde la televisión de Rumania denunciaron que ‘les cambiaron’ los votos...
