Lun. 13. May 2024, Santa Fe - Argentina
Editorial

CONFIESO QUE ESTOY ASOMBRADO

CONFIESO QUE ESTOY ASOMBRADO

SANTA FE-ARGENTINA  (por Rodolfo O. Gianfelici, PrensaMare)  Confieso que estoy asombrado. Aunque parezca mentira, en plena pandemia, a mis 65 años, con tantas décadas de militancia política, con tantos horrores observados en el mundo, en verdad que me he asombrado nuevamente.

Ya tenía asumido que después de ir viviendo lo que el imperio y el capitalismo ha sido capaz de “construir” en el mundo y la historia, ello ya iba a ser imposible. Pero debo reconocer, que en esta permanente tarea de re-inventarse, el capitalismo me ha sorprendido nuevamente.

El 26 de mayo de 2020, EEUU superó tranquilamente los 98.000 muertos.

En cuanto a los fallecidos por estados, Nueva York tiene 29.229 (supera a Francia), Nueva Jersey llegó a 11.147 (más que Bélgica), Massachusetts llegó a 6.416 (superando a los Países Bajos), Michigan alcanzó los 5.241 (relegando a China), y Pensilvania tenía 5.146 (más que Turquía). Valores todos ya superados mientras se leen estas líneas.

Un EEUU que, con su presidente Donald Trump a la cabeza se ha burlado del coronavirus, sin otorgarle importancia, y sin preocuparse por llevar adelante una política de Estado preventiva, resolutiva de urgencia y a futuro. Habiéndose quedado con el “record” (nada elegante, por cierto) de ser el país con más muertos del mundo. Y donde aquellos países (e irresponsables autoridades) han imitado a Trump, les han impuesto a sus países las mismas consecuencias que sufren los estadounidenses.

Tal es así que, en el listado de mayores víctimas mortales del mundo, detrás de EEUU (n° 1, con 98.916), aparecen el Reino Unido (n° 2, con 37.048) y Brasil (n° 6, con 24.600). Ahora bien: si se consideran el total de caso, también allí los estadounidenses tienen el n° 1 (1,662 millones), apareciendo detrás, Brasil (n° 2, con 374.898), y el Reino Unido (n° 4, llegó a los 262.547 infectados).

En un mundo donde los números mandan; donde se habla de riesgo país, de inflación, de PBI, de endeudamiento, de balanza comercial, de emigrados, de crecimiento… y se apela a la simple comparativa para tratar de sostener mentiras y engaños, ese mecanismo de reduccionismo, también es una forma de ocultar la verdad.

Tanto es así que en esta maraña de números de enfermos y muertos que se actualizada día a día, hora a hora y segundo a segundo, como un juego macabro, se pierde la noción de la realidad y hasta de la historia.

La denominada ‘guerra de Vietnam’, fue una acción imperialista de EEUU que llevó tropas a miles de kilómetros de sus fronteras para impedir que el pueblo vietnamita construyera su nación y futuro. “Reemplazó” en esa cruel tarea a los franceses que debieron abandonar ese territorio, derrotados. Esa presencia de EEUU se extendió entre 1955 y 1975; casi 2 décadas (¡).

Fue (hasta la invasión de EEUU a Afganistán) la contienda más extensa de su historia, provocando una cifra que oscila entre 4 y 6 millones de muertos vietnamitas. Mientras que EEUU sumó 58.159 muertos y 1.700 desaparecidos.

El invasor llegó a superar (oficialmente) los 550.000 efectivos, con más 100.000 aliados (de otros países). Quienes nacimos en la década de 1950 nos criamos leyendo diarios que en tapa durante los ‘60 y hasta el 30-4-1975, mostraban cómo EEUU “triunfaba” y “derrotaba al comunismo” en Vietman. Fueron casi 2 décadas de mentiras mediáticas, pues un día se dijo que se firmaba la paz en París, y que los estadounidenses… se retiraban (¡).

Durante todos esos años de invasión y crímenes, EEUU tuvo como mandatarios a Dwight Eisenhower, John F. Kennedy, Lyndon Johnson, y Ricahrd Nixon. Todos ellos sumaron en Vietnam 58.159 muertos propios.

Para los amantes de los números –aprovechemos-, entre 1966 y 1972, EEUU lanzó 12 millones de galones de Agente Naranja (con dioxina) que produjo la contaminación y muerte de más de medio millón de civoles vietnamitas…

Volviendo a las cifras de los 4 mandatarios sentados en la Casa Blanca, en 2 décadas de guerra sumaron –en total-, menos muertos que los que ha provocado la irresponsabilidad (y criminalidad planificada?) de Donald Trump en pocos meses.

Como dato complementario -pues la prensa occidental casi lo ha ignorado-, la política preventiva del gobierno argentino ha hecho que la pandemia se mantenga controlada, con 13.228 infectados y 490 muertes. Frente a ellos, los derechistas y neoliberales (encabezados por los opositores Mauricio Macri, y la prensa hegemónica) reclaman el fín de la cuarentena (para imitar a Trump y Jair Bolsonaro).

En verdad que el capitalismo sigue sorprendiéndome. Máxime cuando habla de derechos humanos, libertad y democracia...