CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA  (PrensaMare)  El expresidente Mauricio Macri reapareció y considero la Argentina sufrió "los efectos de la pandemia y la cuarentena". Un hecho inédito por cierto de su parte, que durante meses ignoró el problema sanitario que afecta al mundo.

Macri dijo que "si algo bueno dejó este año es la demostración de que aún en los momentos más duros" el compromiso con los valores "está intacto", afirmó en las redes sociales, aunque sin precisar a qué valores se refería.

"Queremos vivir en paz, con respeto, con trabajo, en libertad, sin mentiras ni atropellos, y estamos dispuestos a luchar por ese país que queremos", añadió. Una expresión generalista, que se contradice con lo que él hizo entre 2015 y 2019.

Señaló que "el año había empezado para muchos con la expectativa lógica ante un nuevo gobierno", pero para él, ese "optimismo se fue diluyendo" (¿?).

"Nosotros mismos, como oposición, le ofrecimos ayuda en la transición y lo apoyamos en las cosas que creíamos que valían la pena. Ese optimismo, sin embargo, se fue diluyendo", consideró. Agregando como ejemplos "la suelta de presos peligrosos, la falta de un rumbo económico, las primeras agresiones al Poder Judicial… profundizaron la recesión y generaron dudas sobre las convicciones republicanas de gobierno".

Lógicamente que sus afirmaciones constituyen una reiteración de mentiras, en tanto y en cuanto jamás se produjo una suelta de presos; y existe rumbo económico (contrario a lo que él proclama). En cuanto a la recesión es bueno que haya reconocido (sin darse cuenta) que ella ya existía y fue una herencia grave que le dejó al actual gobierno peronista.

Respecto a las ‘convicciones republicanas’, la expresión casi constituye una burla, proveniendo de quien encarceló, pretendió imponer la ‘ley de la defensa propia’ (halagando y recibiendo al policía Chocobar), y habiendo manipulado escndalosamente a la justicia. Sin hablar de las acciones de espionajes…

Lógicamente que sostuvo que la cuarentena fue de las "más largas y destructivas del mundo" porque "muchos perdieron sus trabajos, ante un oficialismo que se dedicó a predicar miedo y más miedo, ejercer su autoridad, su poder y criticar a la sociedad por el aumento de casos".

Indicando que pese a ello, "aún así fuimos de los países con más muertes por Covid". Lo cual tampoco es verdad, y no es responsabilidad del gobierno nacional que la sociedad no cumpla con las medidas sanitarias de prevención, ni que el PRO haya convocado periódicamente cada 20 o 25 días a alguna marcha y salidas a las calles, que solo sirvieron para agravar la situación sanitaria.

Llamativamente para Macri “millones de argentinos que perdieron su empleo”. Lo que no es verdad y olvida que durante sus 4 años de gestión el país pasó de 5% al 10% de desocupación. En cuanto a que habrá “consecuencias psicológicas, educativas y sanitarias de otras patologías”, habría que recoprdarle que durante su gestión, uno de sus ministros valoró y destacó que los argentinos deberían “convivir con la incertidumbre” (¡), mientras recomendaban que los desocupados abrieran empresas (¿?) o “fabricaran cerveza artesanal”....

Finalmente de manera olvidadiza y demagógica, sostuvo: "Por eso estoy lleno de esperanza, porque mi confianza en los argentinos es total. Mi confianza en ustedes es absoluta".

El exmandatario olvidó sus lamentables declaraciones tras perder las elecciones PASO en 2019, cuando atacó a quienes no lo votaron, y abrió la puerta a una megadevaluación, que empobreció aún más al país y a sus habitantes.

Un Macri que pretende mostrarse reflexivo, y apenas es lo mismo de siempre.