SANTA FE-ARGENTINA  (PrensaMare)  Nadie puede negar que la degradación que ha sufrido la Policía santafesina como institución, jamás se había observado en democracia. Pero los 12 años de gobiernos socialista-radical, ha dejado esa lastimosa herencia.

Los casos de policías en todos los niveles, involucrados en hechos delictivos y de corrupción han sido la constante de dicho período.

Ahora se ha sumado otro hecho alarmante (más allá de los comentarios que rondan por los pasillos tribunalicios), y alcanza a la mismísima justicia.

Ua investigación penal dejó muestras donde un grupo delictivo recibía colaboración desde adentro de una… Fiscalía rosarina.

Se sospecha directamente de personal civil del mismo Ministerio Público de la Acusación (MPA), según se expuso el 23 de julio en la audiencia pública en la que se ventiló una trama de extorsiones.

Fue así que se descubrió una red de casinos clandestinos en el Gran Rosario y en la que fueron acusadas 5 personas, entre ellas un oficial retirado de la policía y un preso por instigar el atentado cometido en enero 2020 contra el Casino City Center (fue asesinado un apostador).

La investigación dejó al descubierto al comisario mayor retirado Alejandro Torrisi (ex jefe de la Unidad Regional VI de Villa Constitución y con experiencia en Investigaciones de Rosario). Él fue apresado cuando se retiraba de un casino clandestino de Villa Gobernador Gálvez con dinero en efectivo en un sobre.

Otro acusado es Maximiliano Díaz, que participó de extorsiones al Sindicato de Peones de Taxis y de organizar la balacera que terminó asesinando al gerente bancario Enrique Encino.

Pero todavía faltaba pues se estaría ante la complicidad entre personal del MPA y personas de esta banda delictiva. Tras el ataque al casino, el 9 de enero, 2 hombres fueron detenidos con armas. Es allí cuando telefónicamente Díaz, le pidió a una persona que “moviera contactos” para la liberación de los dos apresados.

Quien recibió el pedido fue Leonardo Andrés Peiti, de 46 años con antecedentes en controlar empresas de juego ilegal y que está prófugo. Los fiscales Luis Schiappa Pietra y Matías Edery dijeron que Peiti recibió el pedido de Díaz. Primero se contactó con un policía (Torrisi?) que no pudo hacer nada pues intervenía Gendarmería y ya estaba judicializado.

Fue así que Peiti se comunicó con alguien en el Centro de Justicia Penal, que trabaja en una Fiscalía. Fue allí que el hombre de la justicia le pasó datos sobre la causa. Agregando: “No tengo la causa yo” (¡).

Peiti recibió el mensaje de su contacto dentro de la Fiscalía y se lo reenvió a Díaz. De esta forma quedó al descubierto que hizo la consulta (dentro de Fiscalía), y que ese hombre de la justicia le había respondido.  

Los memoriosos…  : recuerdan que 2 años estos mismos fiscales descubrieron en otra causa, que 3 policías que se desempeñaban con ellos, colaboraban con el imputado para desviar la investigación en su contra o ayudarlo con datos.

La diferencia…: con este nuevo caso es que por primera vez se trataría de un civil de la justicia involucrado con una banda delictiva.

Otros imputados en esta causa son Otniel Almonte De León, dominicano de 32 años. Preso como coautor del asesinato del policía Cristian Ezequiel Ibarra, en julio de 2019 en una ‘pelea’ por drogas. También imputaron a Flavia Broin (pareja de Díaz), que cobraba el dinero producto de extorsiones. Otros, son Ariel Máximo “Guille” Cantero, y José Sebastián Perlo (asociación ilícita, extorsión y violación de leyes de juego).

El WhatsApp al que accedieron los fiscales expresa: “Y Hernán Horacio Quinteros. En esta se comió un encubrimiento por andar con un auto robado y tenía una 9 mm cargada, le metieron portación de guerra. Fue ayer, por protocolo tenía que pedir prisión preventiva, pero aparentemente se puede cerrar después de peritar el arma. No tengo la causa yo, pero dejame ver como metemos un comentario ahí. En 1 mes le podrían dar la libertad, no tiene antecedentes así que seguramente”; todo indica que fue enviado por el hombre de la justicia...