CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA  (PrensaMare)  La detención del médico Rubén Mühlberger y el escándalo que ha generado su clínica multipropósito, terminó provocando un cortocircuíto entre dos conocidos del periodismo de la farándula local.

Uno de esos choques ha sido –al aire- el que protagonizaron la periodista Marcela Tauro y el conductor de Intrusos, Jorge Rial. Un cruce que sorprendió a sus compañeros en medio del programa, y a los televidentes.

Hecho que –por cierto- trajo consecuencias, pues al día siguiente de dicho hecho, Tauro ya no apareció como panelista del programa.

Se trataba de la opinadora que durante más tiempo ha permanecido junto a Rial en el ciclo. Inclusive en varias oportunidades ambos dieron muestras de mutuo afecto.

El problema se suscitó cuando Rial le pidió de manera seria y dura a Tauro, que dejara de dar información anónima en vivo. Inclusive le pidió que diera el nombre de su infórmate, y ella se negó. Lo que generó tensión.

Ocurrió en medio de un programa donde Rial había sentado como figura central del caso Mühlberger a un exempleado, y Tauro con sus cuestionamientos (desubicados?) parecía que lo estaba saboteando.

Al día siguiente, Tauro no apareció sentada y la reemplazó Débora D'Amato.

Se informó que la salida se debía a que Tauro debía acatar la rotación obligatoria debido a las medidas sanitarias y que ello ya estaba pautado de antemano.

Pocos han creido tal explicación del canal América. Hasta el momento Tauro (55 años) no ha salido a decir nada al respecto, y se especula con que existiría una ‘sanción’ de parte de Rial, y que –cumplida ella-, volvería a sentarse en Intrusos. Pero por otra parte, existe un comentario en el sentido que luego del conflictivo programa y una breve discusión, Tauro habría renunciado y Rial habría aceptado ese alejamiento.

Se sabe que quien tendrá la palabra en última instancia es el canal. Qué pasará…?