CIUDAD DE MÉXICO-MÉXICO  (PrensaMare)  Desde hace décadas, EEUU “trabaja” para impedir que Haití pueda salir de la situación a la que ha sido llevado por ese país, junto a sus aliados europeos.

El objetivo es demostrar al mundo que se trata de “un estado fallido”, y con ello avanzar y tomarlo directamente como una nueva colonia (simil Puerto Rico).

No es casual que desde hace unos años se vengan incrementando las presencias y acciones de pandillas en Haití. Además, es un secreto a boses que el territorio es utilizado por narcotraficantes para asegurar la llegada desde zonas de producción en Colombia, al mercado estadounidense. Ello realizado en las mismas narices de la... DEA (organismo de EEUU de ‘control’ del narcotráfico).

Que ahora autoridades de EEUU hayan comunicado que efectuarán una ‘donación’ de 60 vehículos y 200 equipos para la Policía Nacional de Haití (PNH), para ser usados por unidades antipandillas, no es casual.

Lo cierto es que estas ‘ayudas’ no hacen más que posibilitar la penetración de fuerzas de seguridad de EEUU sobre las ya débiles fuerzas haitianas. Lejos de avanzar –como dicen- en programas de desarrollo comunitario y prevención de pandillas, lo que se hace es sellar el control de las fuerzas nacionales a manos de las de EEUU.

Entre las últimas acciones criminales de estas pandillas se encontró el bloqueo a los camiones cisterna de combustible en las terminales petroleras. Lo que ha producido la escasez de gasolina en todo el país. Ello generó un caos en todas las actividades del país, obligando a empresas e instituciones a adecuar sus funcionamientos (con reducción de sus horarios de funcionamiento o suspensión de sus servicios).

En una muestra del poder de avance estadounidense, el mismísimo portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, en rueda de prensa, había prometido la entrega de productos petrolíferos a las gasolineras haitianas (¿?).