Mar. 14. May 2024, Santa Fe - Argentina
Política

NI MACRI NI BULLRICH; LA HORA DE LARRETA Y VIDAL ?

NI MACRI NI BULLRICH; LA HORA DE LARRETA Y VIDAL ?

SANTA FE-ARGENTINA  (por Rodolfo O. Gianfelici, PrensaMare)  Las disputas internas, las incapacidades y las torpezas llevaron a Mauricio Macri y a Patricia Bullrich a –casi- sellar su ‘retiro efectivo’ como conductores del PRO (y de Juntos por el Cambio).

Desde antes de entregar la presidencia (Macri) y de salir del Ministerio de Seguridad (Bullrich), ya habían iniciado su ‘bajada de línea’ de odio. Apostaron a seguir polarizando la sociedad. Hicieron sus propios juegos, autoalimentándose y autoconvenciéndose que marcaban el rumbo certero para el PRO (y Cambiemos).

No entendieron que la sociedad reclama otro tipo de propuestas, y en ese sentido la siempre-sonriente María Eugenia Vidal y el cinismo de Horacio Rodríguez Larreta, fueron construyendo ‘su’ lugar, que colisionaba con el dúo Macri-Bullrich.

Por un lado, Larreta aprovechó que el coronavirus lo hizo sentarse por meses junto al presidente Alberto Fernández, con lo que armó una imagen de “dialoguista”. Lo cual –por cierto- no era real; se trataba simplemente del uso de una máscara, pues en los hechos, su gestión respondía y actuaba como Macri-Bullrich indicaban.

Por el otro lado, Vidal, que fue ampliamente derrotada en su intención re-eleccionista en provincia de Buenos Aires, logró un blindaje escandaloso de parte de la prensa hegemónica, que la protegió, la mantuvo ‘escondida’, y la re-lanzó como si su paso por la gobernación no hubiera sido lamentable, de una elevada ineptitud, sin soluciones y con un hiper-endeudamiento.

Así, luego de dimes y diretes, idas y vueltas, dichos y decires, se llegó al momento en el que Macri se sintió desafiado y pretendió ‘poner en caja’ (primero) a Rodríguez Larreta, y éste se mantuvo firme.

Luego Macri reiteró su apriete, y actuó de la misma forma ante Vidal, y recibió la misma respuesta.

Así, ante semejantes fracasos y falta de autoridad partidaria (el conductor), se fue de paseo a España, y desde allá publicó que se consideraba... “prescindente”. En otras palabras: imposibilitado de imponer a Bullrich como n° 1 de la lista de candidatos a diputados nacionales en suelo porteño, se lavaba las manos y abandonaba a su delfín

Macri no quería que su prohijada fuera derrotada en una interna (por Larreta-Vidal), pues de ocurrir, todo el costo político lo pagaría él. Prefirió dejarla en soledad y mostrarse, como si nada hubiera pasado. Total era: “prescindente” (¿?).

Bullrich resistió una horas, pero luego descubrió (¿?) que “no quería ganarle a Vidal” (declaración en canal TN) y que su objetivo es ser “candidata a presidenta en el 2023” (declaración en canal TN).

Así, siguiendo los pasos de su jefe (que se declaró –reiteramos- “prescindente”), ella ‘se bajó’ de una pelea que al final había descubierto que no quería dar... (¿?).

De esta forma, los ‘ganadores’ por puntos de una peleíta totalmente devaluada y que solo le interesa al antiperonismo militante y a los medios hegemónicos, Larreta-Vidal se impusieron a Macri-Bullrich.

En el primer dueto aparecían el político que administra el único distrito importante del PRO, y Vidal, que no pudo lograr la reelección bonaerense (y quiere ser diputada porteña). En el segundo dueto aparecían el expresidente que presentándose a la reelección fue el único que no pudo lograrlo en el país, y la titular del PRO, que había sido “elegida” a dedo por... Macri.

Una disputa sin ideas, sin propuestas, sin participación popular; solo una pelea por el n° 1 de la lista de diputados nacionales porteños, donde estuvieron embarcadas las cuatro (4) principales figuras políticas del PRO, durante meses...

Una disputa que llevó a que ese desinterés generalizado de los votantes y ciudadanos en general, fuera aprovechado por el grupo Clarín que instaló como candidato a diputado en suelo bonaerense al neurólogo radical Facundo Manes. Todo un mensaje para Cambiemos...

Lo cierto es que la peleíta hace que Larreta aparezca teniendo algo más de poder e independencia de Macri. A todo ello, la derrota de Macri es tan evidente que él apeló a reiterar sus ausencias (o ‘escapadas’) que fueron clásicas siendo jefe de gobierno porteño. Cada vez que existía un problema o tema urticante, ‘desaparecía, se escondía y la prensa lo protegía y cubría.

En julio se encuentra descansando con su cónyuge y su hija Antonia en España. No se sabe si llevó la reposera que usaba en Argentina...

Los de memoria cercana recuerdan que en plena pandemia se fue a la Costa Azul francesa, y desde allá enviaba mensajes (¡).

En cuanto a Bullrich, nadie -dentro del PRO- sabe a ciencia cierta cual será su futuo. No en el 2023, sino en tiempos más cercanos. Porque si había llegado a conducir el partido sin contar con poder político territorial, ahora hasta Macri la ha abandonado.

Lo único que le queda es la protección mediática, pues es la vocera e instaladora del máximo odio. Y ello es necesario para determinados y pequeñísimos grupos de poder y grupos de presión. Siempre necesitan una ultra a mano...

Estos desencuentros entre los ultras (y los cínicos) del PRO, ha hecho que los radicales –de la mano del grupo Clarín-, se ilusionen con que ha llegado el momento para ellos de reposicionarse dentro de Cambiemos, y ‘pelear’ (en verdad: negociar) algunos carguitos más.

El tema es que Macri y Bullrich apuestan a los ‘nuevos emergentes’ de la política argentina como... El Dipy y Alfredo Casero (¡). No es casual que los medios les otorguen tantos espacios en tiempos pandémicos.

La gran incógnita está en saber si el dueto derrotado (Macri-Bullrich) solo ha caído a manos de sus correligionarios Larreta-Vidal, o si además, ha comenzado su etapa ‘de desgracia’, y han sido abandonados por el poder en serio.

O sea: sus amigos de EEUU. Ello en razón que la gran-denunciadora-gran, Elisa Carrió ya les dio la espalda...

De ser así, la justicia argentina va a tener mucho trabajo. Y posiblemente –si ello suceda- la única que va a seguir contando con ciertos y pocos amigos (de una agencia de Inteligencia de un país asiático), podría ser Bullrich...

Lo cual significaría que la derrota de Macri en la peleíta interna, habría sido algo más que ello.