Lun. 13. May 2024, Santa Fe - Argentina
Opinión

LA PELEA ENTRE ESPÍAS Y OTROS (Rodolfo O. Gianfelici)

LA PELEA ENTRE ESPÍAS Y OTROS (Rodolfo O. Gianfelici)

SANTA FE-ARGENTINA (por Rodolfo O. Gianfelici, PrensaMare)  Teníamos razón. Por ello invitamos a re-leer el artículo: “Argentina y los espías”, https://www.prensamare.com.ar/adm/noticias-frm.php?action=edit&id=19196 .

El mismo fue publicado el reciente 11 de abril. El delicado tema de Inteligencia (de espías) es algo extremadamente grave, en manos de ineptos, corruptos y oportunistas.

Y a propósito, a mediados de este abril los argentinos se enteraron de la difusión (escandalosa) de un ‘dossier’ escrito por quien conoce desde adentro el tema; lo que lo convierte en un gravísimo “informe buchón” (alcahuete, entregador). Allí quedaron expuestos (¡) nombres y apellidos de quienes ocupan cargos en la AFI (Administración Federal de Inteligencia).

Si Se conocieron de manera pública las identidades de funcionarios jerárquicos que conducen el espionaje argentino.

Un hecho de extrema gravedad. Podemos cuestionar y repudiar a cada uno de ellos –y sus acciones-, pero nunca que se conozcan sus identidades. El hacerlo no puede ser justificado por nada, a menos que se traten de acciones de traición a la patria o delictivas. De no existir elementos de prueba, constituye una mayúscula irresponsabilidad.

Si no se está de acuerdo y/o existen evidencias y/o presunción de delitos por medio, existen mecanismos en democracia para ello tenga una solución.

El ‘dossier’ es la expresión máxima del estado de gravedad de la Inteligencia argentina, y demostrativa que estamos en manos de personajes –que por una u otra razón-, atentan contra los intereses nacionales.

La AFI (Agencia Federal de Inteligencia) ha sido tomada como un ‘botín de guerra’ por la gestión de Javier Milei, siguiendo las “enseñanzas” y accionar de la gestión de Mauricio Macri, para acciones partidarias, particulares y grupales.

Donde –por si fuera poco-, la irresponsable Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, fue a EEUU y visitó la sede de la CIA. Un hecho que ha incomodado sobremanera a sectores internos de la AFI, porque esa no es área que le corresponda a dicha funcionaria.

Es conocido (de sobra) que ella posee aceitados contatos y relaciones con la CIA (y el Mosasd también...); pero debería guardar ‘ciertas formas’.

Esa visita disgustó a muchos espías e incluso a sectores del entorno de Milei. Posiblemente esta visita haya sido una “respuesta" de Bullrich para quienes poco tiempo atrás quisieron quitar al Ministerio de Seguridad el área de Inteligencia Criminal, para sumarla a la AFI. Momento en que la ministra puso su queja que hasta llegó al propio Milei...

Esta escandalosa pelea lejos de tranquilizarse y ‘mantener las formas’ ha tenido un nuevo capítulo con la aparición del dossier con los nombres de todos los que ocupan cargos en la AFI (lo que está prohibido por la Ley de Inteligencia).

Las miradas comenzaron a cruzarse hacia todos lados buscando algún responsable, y allí todos coinciden en afirmar que quien habría elaborado el mismo ha sido un... militar cercano a Bullrich.

Apuntándole a personas de confianza de Milei (el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el titular de la AFI, Silvestre Sivori), porque no hicieron “limpieza” en la AFI, echando a todos “los peronistas” (¿?) de la misma.

Luego el dossier expresa lo que todos saben: Que desde la AFI salen dineros (sin control) para sobornar periodistas, opinadores y hasta medios de comunicación “en negro”. Dinero que también se usa para ‘reforzar’ los ingresos del ‘ejército de trolls (mercenarios a sueldo) que tiene Javier Milei para operar desde las redes sociales. El dato habla de una cantidad inimaginable para el ciudadano común en medio que Milei dice “no hay plata”...  más de 2.000 millones de pesos de fondos reservados para operaciones (¡).

Considerando la importante ingerencia que tiene la CIA dentro de la jerarquía (y debajo también) de la AFI, algunos consideran que este dossier se trata de una ‘maniobra pesada’, que habría liderado el bullrichismo, pero en consonancia con las ‘necesidades de la agencia estadounidense.

Aunque el referido dossier no lo dice, se comenta que parte de esos dineros también se usan para comprar información (y fotos y videos) que pueden “comprometer” a opositores e incluso a aliados a Milei (que consideran que no son del “riñón mileita”). Estas adquisiciones incluyen a periodistas, fotógrafos independientes, fotógrafos de medios, personajes de la farándula, y hasta periodistas faranduleros...

La AFI está des-organizada para operar ‘con vida propia’, y depende de terceros (en este caso la CIA) para que le aporte fuentes de información. Los espías argentinos son simples burócratas “especializados” en hacer... escuchas telefónicas (¿?); nada más.

En ese camino, la CIA aporta lo que a ellos les conviene (sea verdad y/o mentira); la AFI carece de herramientas y personal para tareas propias, más allá de operar sobre pobres alcahueterías.

Ello puede asombrar...?

No. Es la realidad y punto. De la misma manera que el presidente Milei -como un inepto mayúsculo- solo escucha lo que le ‘asesoran’ a nivel de política internacional la generala Laura Richardson (que hasta ha sabido desplazar en parte al propio embajador estadounidense en Argentina) y la embajada de Israel.

Esta dependencia al nivel de servilismo extremo pone al país al borde de ser un simple peón del tablero de la geopolítica internacional, donde otros son el rey y la reyna. Que cada uno saque sus conclusiones.