SANAÁ-YEMEN  (PrensaMare)  Las fuerzas yemeníes lograron resistir y repeler un ataque de los aliados de Arabia Saudí en el oeste de Yemen.

Se produjo en la provincia de Al-Hudayda (costa del mar Rojo), cuando las Fuerzas Armadas de Yemen frustraron un intento de penetraciónde los países agresores. Tras ello, las autoridades reiteraron la oportunidad que les brindan “la amnistía general” que se les ha ofrecido y “regresar al abrigo de la patria antes de que sea demasiado tarde” (para colaboradores de los invasores).

Junto a las Fuerzas Armadas estuvieron los combatientes del movimiento popular yemení Ansarolá, que avanzan en su objetivo de la liberación de la provincia de Marib; sus fuerzas conjuntas ya están cerca de la capital provincial.

Se informó que el invasor sufrió 4.800 muertos y heridos. La cadena libanesa Al-Mayadeen ha transmitido los avances del Ejército yemení y los comités populares en el eje de Marib (centro-oeste) y sus alrededores. Han tomado parte del control de una presa y están a solo 8 km de edificaciones urbanas.

Han logrado liberar en las últimas semanas unos 1.200 kilómetros cuadrados, que debieron ser abandonados por los agresores (la coalición saudí, sus aliados y bandas terroristas como la de Al-Qaeda).

El movimiento popular Ansarolá ha aseverado que, junto a las fuerzas yemeníes, seguirá atacando a los mercenarios saudíes hasta la liberación total de Yemen.

“La operación del Ejército y de los comités populares continuará hasta la liberación de todo Yemen. Los agresores [saudíes] son responsables de la reciente escalada de tensiones”, declaró Muhamad al-Bajiti, miembro del Consejo Político de Ansarolá, a la prensa.

Los militares yemeníes se han acercado a la ciudad de Marib desde tres frentes, obligando al agresor a retroceder. Hasta el momento, desde que se inició el ataque de Arabia y sus aliados respaldados por EEUU (en 2015) se han producido más de 100.000 muertos, la mayoría de ellos niños y mujeres, en el país más pobre del mundo árabe.