SANTA FE-ARGENTINA (PrensaMare) El Tribunal Oral Federal (TOF) condenó a uniformados a penas que oscilan entre los 3 y los 15 años. Se trata de 9 condenados de formar parte de una banda de narcotraficantes integrada por civiles, policías y gendarmes. La banda ‘operó’ entre diciembre de 2015 y el 4 de abril de 2018.
El principal acusado era el policía de la provincia santafesina, Edgardo Oscar Baigoría (49 años), quien recibió la pena más alta: 15 años de prisión. Se le probó el ser autor del delito de "organización del comercio ilícito de estupefacientes y tenencia de estupefacientes con fines de comercialización en concurso real, agravado por la participación de tres o más personas en forma organizada y por su calidad de funcionario público encargado de la prevención de delitos".
Los restantes condenados…
Han sido Emanuel Maximiliano González (34) con 9 años, como "partícipe secundario" del delito antes mencionado.
Estela María Castillo (58) y Osvaldo Ramón Salva (63), vendedores barriales en Villa del Parque y Barranquitas (ambos de esta ciudad capital). Les correspondió a cada uno, 6 años de prisión, al ser considerados "coautores de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, agravado por la participación de tres o más personas en forma organizada".
Cristian Pablo Alberto Mansilla (44), que es sobrino de Baigoría, recibió la misma atribución y 6 años.
A Jorge Ramón Correa (42) le correspondieron 4 años de prisión, por transporte de estupefacientes (por 4 kilogramos de cocaína que debían llegar a Santa Fe en 2017, cuando fue apresado en Salta).
Los gendarmes Damián Osmar Sosa (40), Santiago Armando Alejo (38) y Jorge Ismael Britos (39) fueron declarados culpables por los delitos de "encubrimiento agravado por ser un delito especialmente grave, por haber actuado con ánimo de lucro y por su calidad de funcionario público". Fueron condenados a 4 años (Sosa) y a 3 años (Alejo y Britos), como autor y partícipes necesarios respectivamente.
De estos 3, se condeció la excarcelación el jueves 18, a Alejo (si no se encuentra sujeto a otra investigación).
Esta banda puede considerarase otra de las herencias dejadas por las gestiones socialista-radicales (2007-2019) a las actuales autoridades provinciales, con una policía provincial inmersa en una gravísima crisis de corrupción.
