PARÍS-FRANCIA  (PrensaMare)  Las autoridades de Ámsterdam planean construir un centro erótico alejado del turismo.

En la actualidad, los prostíbulos eran escaparates que daban a la calle. Ahora se piensa limpiar el Barrio Rojo de los turistas que provocan problemas.

Las opciones en cuentan eran construir un hotel sexual o crear un centro erótico.

En el nuevo proyecto, se contempla que las trabajadoras sexuales puedan dormir y desayunar en su tiempo libre en este complejo. El nuevo complejo podría contar con un teatro sexual, un club nocturno, cafeterías, un salón de belleza, una peluquería, y un salón de bronceado, entre otros servicios.

El Consejo de Ámsterdam espera finalizar la implementación de su plan antes que llegue el verano. La alcaldesa, Femke Haselma, prometió limpiar el Barrio Rojo después que su equipo se quejase que los turistas (frecuentemente ebrios y armando escándalo) "faltan al respeto tanto a las prostitutas como a los residentes locales".

Halsema denuncia que, para muchos turistas, "las prostitutas se han convertido en nada más que una atracción para ver y que en algunos casos este interés se acompaña por una conducta disruptiva e irrespetuosa".

Por otra parte...: con el nuevo proyecto se busca atacar una nueva tendencia: "Un gran alza en la prostitución no licenciada y clandestina" cerca del distrito de De Wallen, situado a la lado de la estación central; luagr al que marineros y prostitutas han acudido durante siglos.

La zona de la prostitución en la ciudad también forma parte de los tour turísticos. Existen empresas dedicadas a organizar visitas guiadas a la misma.

Esta idea de…: ocultar el Barrio Rojo no es nueva, y se remonta al 2018. Las autoridades locales decretaron que desde abril de aquel año todos los grupos guiados de cinco o más personas necesitaban obtener un permiso para entrar en el área. Vetaron el acceso a los grupos de más de 20 turistas y prohibieron a los visitantes sacar fotos a las prostitutas.