CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA (PrensaMare)  Una mujer fue hallada muerta en un departamento del Barrio de Belgrano. Todo indica que habría sido asesinada 34 días antes.

El crimen de Laura Sanoner (51 años) es investigado y es sospechado su expareja que posee antecedentes policiales y judiciales. Había sudo hallada en la bañera, con una media de lana en la boca y una sábana blanca cubriéndole la cabeza. Creen que ya llevaba muerta al menos entre 15 y 30 días.

Ya está detenido el exnovio de la víctima, quien aparece como principal sospechoso, que habría cometido un robo. Se trata de Diego Martín Arener (42, foto), que había sido pareja de Sanoner, y que en su momento ella lo había denunciado por robo.

Arener fue atrapado por detectives de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad. Trascendió que el mismo día en que se habría producido el crimen él compró una moto por la que pagó $ 990.000 en efectivo.

La causa quedó radicada en el Juzgado en Criminal y Correccional porteño n° 13, subrogado por el magistrado Gustavo Pierreti y la fiscalía descentralizada de Núñez-Saavedra, a cargo del fiscal José María Campagnoli. Ya se le dicto la prisión preventiva, y el juez Pierreti manifestó: “La defunción se produjo por asfixia mecánica por sofocación, ya que la sábana que le cubría por completo la cabeza y el cuello y la media atada alrededor del cuello y la cara a modo de mordaza, le provocaron la tracción de la comisura de los labios y la consecuente apertura de la boca que, junto con la sábana, obstruyeron las vías respiratorias e impidieron el ingreso de aire”.

Arener fue detenido...

El 29 de septiembre cerca del Barrio Ejército de los Andes (conocido como “Fuerte Apache”), de Ciudadela. Las pruebas en su contra son contundentes, pues en la investigación, la Policía Científica estableció:

• Que las 5 huellas dactilares de “reciente data” (encontradas en un perfume dentro de una lata metálica en la habitación con baño en suite de la víctima) eran de él
• También lo eran las huellas en un vaso que estaba sobre una mesa ratona en el living
• Por otra, se sospecha que –al no haber forzamiento en la puerta-, la víctima y el victimario habrín ingresado juntos al inmueble.

Además, se informó que Arener, había sido condenado por un crimen en Santa Fe; salía con permiso, y en una oportunidad de hacer uso de ese beneficio, no retornó, por lo que se encontraba prófugo.

Por decisión del juez, será procesado con prisión preventivay se le trabó un embargo de 15 millones de pesos.

Al ingresar al inmueble...

El olor nauseabundo que había en él demostraba que no era una muerte reciente. La autopsia lo confirmó: Laura había muerto 34 días antes, como mínimo a partir del 16 de agosto pasado. El sospechoso no posee trabajo registrado. Ambos se conocían desde hacía años. Él pagaba una condena a 20 años por el crimen de un remisero durante un robo en la provincia de Santa Fe.

En una de sus salidas transitorias en 2013, él se radicó en Buenos Aires. Allí conoce a Laura (estando prófugo). La relación se interrumpió abruptamente y ella, el 23 de octubre de 2016 lo denunció por –dijo-, robarle 40.000 dólares, $ 50.000, alhajas y teléfonos celulares.

De acuerdo a la pena impuesta y a su mplimiento –de haber sido el correcto- habría queado en libertad en agosto de 2018. Luego de dicha denuncia fue recapturado y volvió a fugarse en el año 2021; permaneciendo prófugo otra vez, desde ese momento.

Otro dato de...

Importancia colectado en la investigación es que Arener (además de comprar la moto), a finales de agosto adquirió un Volkswagen Vento por 16.200 dólares, el cual puso a nombre de su actual pareja (Pamela G.). Ésta también fue procesada aunque sin prisión preventiva por el delito de encubrimiento.

Para poder cometer el robo, Arener habría torturado a la víctima, y así lograr que ella le entregara la llave de la caja fuerte del departamento. El padre de el ella –que efectuó la denuncia al perder todo tipo de contacto-, declaró que días previos al suceso, le había regalado a su hija 8.000 dólares.

La justicia le imputa a Arener el homicidio triplemente agravado por el vínculo, por haber sido cometido criminis causae (para ocultar el robo) y mediante violencia de género.