MADRID-ESPAÑA  (PrensaMare)  Reciéntemente se decidió el tercer ascenso a Primera, en el fútbol Español. El Elche se agregó al Cádiz y al Huesca.

Pero la dirigencia de Las Palmas “jugaba” otro partido. Porque para la temporada 2019-2020 habían cedido a su jugador Christian Rivera al Girona.

En el contrato se establecía que si el Girona ascendía, existían una cláusula de compra obligatoria. De esta forma, el Girona debía pagar a Las Palmas 1,4 millones de euros (por Rivera).

Un dinero que era una verdadera ayuda mágica para las pésimas cuentas del club. Pero no cobrará, porque Girona no ascendió. Además, Rivera debería regresar a su plantilla. El tema es que el jugador no quiere jugar en Las Palmas; se ha jerarquizado con la casaca del Girona, y ahora deberán tratar de prestarlo a algún club.

Lo cierto es que quedan apenas 3 semanas para que comience el campeonato, y el tema de ubicar a Rivera ya es un problema.

El gol del Elche en el minuto 96 ha sido una pésima noticia para la dirigencia de Las Palmas.