Vie. 26. Jul 2024, Santa Fe - Argentina
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PORQUÉ CHINA ES “EL GRAN ENEMIGO” DE OCCIDENTE...? (Rodolfo O. Gianfelici)

PORQUÉ CHINA ES “EL GRAN ENEMIGO” DE OCCIDENTE...? (Rodolfo O. Gianfelici)

SANTA FE-ARGENTINA (por Rodolfo O. Gianfelici, PrensaMare)  Los diferentes relatos del imperio anglosajón en el siglo 20 y en el actual, han dado forma a “enemigos” a los que se los presenta como que lo son de toda la humanidad (o el mundo).

Lo cual –en principio-, no deja de ser una gran mentira. Podrá ser “enemigo” de ciertas potencias occidentales, pero ellas no representan al mundo. Ellas se autorepresentan, aunque en su discurso pretenden convertirse en representantes mundiales.

Lo segundo atañe a que lo de “enemigo” no lo es tanto si se tiene en cuenta y consideración cuáles son los valores y/o propuestas de convivencia que propone el mismo.

El poder anglosajón –liderado por EEUU y el Reino Unido-, cuenta con sus aliados incondicionales, donde todos se consideran defensores del “mundo occidental” (hasta hace unos años se le agregaba también el de “cristiano”).

Pero aquí también debe hacerse una salvedad: Qué tienen de “occidental”, Australia, Japón, Corea del Sur e Israel...? Y que tienen de “cristiano”, Japón, Corea del Sur, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Catar, Marruecos e Israel...?

Como observamos, se nos plantean varias dudas, que occidente se encarga de no querer explicar; por lo que de vez en cuando resulta interesante tratar de indagar planteando ciertas dudas y buscando algunas respuestas.

Superada la llamada ‘gerra fría’, el discurso estadounidense abandonó la demonización de “los soviéticos”, para pasar a inventar otro. Fue así que el sospechoso ataque a las Torres Gemelas (en Nueva York) instaló la “lucha contra el terrorismo”; para luego ir dando paso al silencioso rodeamiento militar de Rusia; y llegar a la confrontación con China.

La desinformación de la que hacían EEUU-OTAN-Unión Europea-aliados contra Rusia ocultaba que la estrategia era la de asfixiar al país; crearle “crisis internas”; atacarlo militarmente –por áreasa ‘liberar’-; y dividirla dando paso a varias “naciones” a las que occidente manipularía para quedarse con sus recursos naturales.

Ello se desarrolló por décadas, hasta que Vladimir Putin se hartó y tras varias advertencias, actuó contra Ucrania.

Mientras tanto, la ofensiva estadounidense ahora se centra en contra de China a la que no la acepta soberanamente. Inclusive en una muestra de incormprensión de la realidad y la historia humana, no pueden aceptar que los chinos ya son los líderes del comercio mundial y que avanzan a nivel global.

Peor es la situación a la hora de enfrentar la importancia mundial de Eursasia (sustentada en la alianza de Rusia y China). No la entienden, no la aceptan y se encierran en la tozudez contraria a la realidad.

El poder imperial anglosajón apela a un relato engañoso y limitado; no le alcanza con la instalación de mentiras a través del control y manipulación de las principales cadenas (des)informativas; al G7; a la OTAN, al AUKUS (nóvel creación militar del 2021 para ‘controlar’ a China).

Hablar constantemente que Putin es un dictador y que China una autocracia porque su alianza desafía la hegemonía global anglosajona es muy poco (y cada vez más débil). Porque ahora están los BRICS –desideologizados- plantándose ante el Consenso de Washington.

Mientras el imperio sustenta su existencia en la explotación, el militarismo, el robo, la corrupción y las drogas, Rusia se convirtió en la potencia militar n° 1 del mundo, y China ha alcanzado un envidiable desarrollo y capacidades económicas, tecnológicas, científicas y comerciales.

Frente a la Plaza Tienanmen, el 4 de marzo comenzó el Gran Salón del Pueblo. Un encuentro anual donde representantes de la Asamblea del Pueblo e integrantes del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política (CCPPC; órgano asesor con representaciones territoriales, profesionales, sindicales y militares), realizan un balance del año pasado, fijándose los objetivos del futuro inmediato.

Una muestra de participación desconocida para occidente (de la que toman parte tres mil delegados).

En este encuentro, el primer ministro Li Qiang ratificó que el país busca impulsar “un mundo multipolar igualitario y ordenado... una globalización económica inclusiva”. Lo que choca totalmente con el ideario de las potencias occidentales, que solo piensan un mundo unilateral, hegemónico y basado en las amenazas y el sometimiento.

El planteo del premier demuestra a las claras que su país continuará avanzando en obtener una mayor presencia a nivel internacional, apostando por las cooperaciones y acuerdos con otros países, lo que redundará en el fortalecimiento de la multilateralidad (y debilitamiento de la unilateralidad anglosajona).

También en el mismo encuentro, se expuso sobre la situación de Taiwán y el Mar de la China, que son temas prioritarios para Beijing. En tal sentido, fue el Ministro de Exteriores Qin Gang quien realizó una dura advertencia a EEUU, para que evite generar una “situación muy conflictiva”.

Pero a la vez, establecieron que China está atenta a tres situaciones internacionales que no las han generado (y que se sabe quiénes las han producido). La referencia fue a las provocaciones militares y políticas de EEUU en el sudeste asiático; en el conflicto de Medio Oriente, englobando a la Franja de Gaza, Líbano, Siria, Irak, Irán y Yemen; y la situación en Ucrania.

EEUU ha dado nuevas muestras de no comprender que el mundo quiere ser tenido en cuenta; que se está construyendo la multipolaridad, confrontando con la unilateralidad anglosajona. Una de esas muestras de continuar estando a contrapelo de la historia y la humanidad, ha sido la creación –por Washington- del AUKUS en 2021.

Una herramiento militar de la que toman parte también el Reino Unido, Australia (y a la que quieren sumarse Canadá y Nueva Zelanda), para ‘limitar’ a China. Una alianza que tiene en curso la fabricación y provisión de 5 submarinos nucleares, elevando el nivel de riesgo mundial a una situación injustificada. Porque se realizará una transferencia de tecnología nuclear que solo alimenta la carrera armamentista en la región.

Es una provocación de Washington y a la vez una demostración de su decadencia y retroceso en marcha. China ofrece al mundo políticas de cooperación y asociatividad comercial, junto a la financiación del desarrollo allí donde el imperio anglosajón ha explotado y relegado por décadas.

De allí los ataques al BRICS (y su banco), que constituyen la confrontación a las políticas económicas, delictuales, explotadoras y retrógradas del FMI y el Banco Mundial.

Frente a esta realidad creativa, cooperativa, de desarrollo, de investigación y de financiamiento, occidente responde con militarismo. Los ejemplos son claros en los últimos tiempos:

  • Ucrania
  • Franja de Gaza
  • Yemen
  • Marruecos y Sahara Occidental
  • Ecuador
  • Libia.

El AUKUS podría ser la ‘gran apuesta’ para generar una confrontación con Taiwán como base. Pero también debe tenerse en cuenta la situación en el Atlántico Sur, con el control británico de las Islas Malvinas, las ambiciones (de EEUU y el Reino Unido) sobre la Antártida, y particularmente sobre la Patagonia argentina.

Aunque muchos no se percaten o miren para otros lados, el ‘olor a pólvora’ está presente y muy cercano...