JUNCOS-PUERTO RICO (por Dr Carlos Pérez Morales, Geógrafo/Historiador)  Con atrevimiento, tomo prestado el título del libro "Mi Isla Soñada" del laureado escritor puertorriqueño Abelardo Díaz Alfaro.

Una noche me acosté pensando en mi Puerto Rico y que podría ser de él en un futuro cercano.

Mi bella Isla de Puerto Rio, "la que al cantar el gran Gautier  llamó la "Perla de los mares" se ha convertido en un país, donde impera el tráfico de drogas, el asesinato por contrato, la venta de las drogas y el control de los "puntos" de venta de drogas.

Una vez nuestro país, aunque no fuera un paraíso, fue conocido por su tranquilidad y por su seguridad. Por eso, y por otras circunstancias se le llamó "La Isla del Encanto" la cual llamaron principalmente los extranjeros que admiraban su belleza y esplendor.

El Departamento de Educación, con el mayor presupuesto del gobierno se ha convertido en un refugio de forajidos. Hace unos años, su Secretario, principal oficial ejecutivo, Víctor Fajardo se robó varios millones de dólares de ese departamento, que dirigía. Otra Secretaria de Educación cumplió cárcel por una tenebrosa y falsa acción con un apartamento de vivienda.

Otros funcionarios de alto nivel también han robado millones de dólares y están siendo juzgados por el gobierno de Estados Unidos.

La isla se ha convertido en un verdadero espanto. El grave problema de su emigración, cuando la pobreza del país se desgarró por inmensas tierras extranjeras de Estados Unidos.  lo podemos reconocer en las obras "La Carreta" de René marqués, "En mi Viejo San Juan", de Noel Estrada y en el cuento más corto de nuestra literatura de José Luis González "La Carta".

El gobierno de Puerto Rico, en varias ocasiones se proclamó y se convirtió en el exportador del "gobierno sin corrupción."

En estos momentos, el robo, el pillaje, los contratos fatulos, el soborno y hasta la introducción en  la política por parte del narcotráfico, el crimen organizado y otras fechorías gubernamentales, son la orden del día.

El estatus colonial, bajo el que vive Puerto Rico desde hace más de 530 años, primero bajo España y como dijo Martí "con el Coloso del Norte", es el impedimento más grande para lograr nuestro libre comercio y nuestra libertad como lo señaló nuestro querido cantor Antonio Caván Vale (El Topo), en su magistral interpretación de su canción "Verde Luz" (Isla mía, flor cautiva, para tú quiero tener…, libre tu cielo, sola tu estrella…).

El llamado progreso que se vivó bajo la gobernación del Partido Popular Democrático, no hubiese sido posible si el gobierno de Muñoz Marín no hubiese expulsado una cantidad grandísima de puertorriqueños hacia Estados Unidos y si no se hubiese promovido el uso de la píldora para contrarestar los nacimientos en la Isla (Me voy pero un día volveré/A buscar mi querer/A soñar otra vez, En mi viejo San Juan…).

Puerto Rico es una isla llena de automóviles. Es por eso que se lanza mucho Bióxido de Carbono a  la atmósfera contribuyendo de esa manera al cambio climático. ("Luego miró hacia arriba, hacia el puente y la carretera. Automóviles, guaguas y camiones pasaban en un desfile interminable. (En el fondo del caño hay un negrito), de José Luis González), (La Guaracha del Macho Camacho,) de Luis Rafael Sánchez).

Fue entonces cuando desperté. Mi sueño se convirtió en pesadilla al recordar todo lo que había soñado era realidad.

Pero tengo esperanzas de que Puerto Rico, tendremos "Un Mundo Mejor.