SANTA FE-ARGENTINA (por Rodolfo O. Gianfelici, PrensaMare)  Durante meses y cuando se asistió a la pandemia, el Director del Hospital Cullen, Juan Pablo Poletti (‘el doctor Poletti’), fue un abonado (casi) diario al noticiero de Canal 13 y a los medios radiales de esta ciudad.

Se hizo muy conocido y todos esperaban sus palabras para conocer la situación sanitaria en un momento duro para el país. Se podría decir que Poletti se transformó en un “comensal” más de los santafesinos, pues “almorzaba” con ellos. El poder de la televisión le permitía "sentarse" diariamente junto a los santafesinos que almorzaban o cenaban.

Pasaron los meses y la pandemia ha quedado superada, mientras comenzó a rumorearse que desde diferentes partidos políticos habían ‘sondeado la calle’, y aparecía dicho profesional muy bien instalado en las encuestas.

Ello en razón de poseer una muy buena imagen profesional; es creible; no protagonizó escándalos; y para el establishment, aparece como un “no-político” (lo que le otorgaría garantía de capacidad -?-).

Es así que llega a marzo de 2023 –año electoral-, con Poletti siendo tentado desde diferentes fuerzas políticas, para que sea candidato.

Se debe reconocer que el profesional no solo estuvo al frente del hospital central capitalino por donde pasaron la mayoría de los infectados por el virus, sino que ya desde antes, mostró sabiduría y capacidad para conducir el mismo. Si se me permite un hecho personal, debo reconocer que debido a una grave dolencia de una persona cercana, asistí por meses al Cullen y todas y cada una de sus áreas (Show-Room, Cardiología, Terapia Intensiva, Administración, Salas...) dieron respuestas satisfactorias -no solo desde lo sanitario específicamente-, sino desde lo humano.

Ello fue posible porque –seguramente- desde ‘arriba’, desde la conducción (Poletti) se baja dicha línea. Lo cual es destacado, valorable y debe ser reconocido.

No tengo absolutamente nada contra Poletti, como médico y conductor del Cullen. Todo lo contrario.

El tema está en que ahora aparece tentado, tironeado desde diferentes fuerzas políticas, y él –según informó a la prensa-, está analizando qué fuerza política elegir y a qué candidatearse...

Lo cual no deja de llamarme la atención. Porque ello evidencia que no tiene rumbo, ni idea, ni propuesta política alguna. Porque –todo indica-, que le daría lo mismo ir por cualquier fuerza política. Y además, no tiene en claro para qué puede servir...

Porque se habla que le han ofrecido ser candidato a nivel local, provincial y hasta nacional (¡). Un dato no menor, porque –a la vez- deja expuesto el nivel de crisis interna que afrontan las fuerzas políticas que lo han buscado.

Pareciera que nadie se da cuenta que ocupar un cargo en la estructura del estado, en este caso en el Poder Ejecutivo o en el Poder Legislativo, no es lo mismo que afrontar una pandemia o administrar un hospital.

Textualmente en el diario El Litoral (2-3-2023), Poletti declaró: “me junté con varios espacios. Tengo que definir si entro, con quién y de candidato a qué”.

Todo indicaría que ya se sabe bajo que fuerza política ‘jugaría’, porque el propio diario El Litoral (grupo Clarín), le da el aval y respaldo a expresar en la misma nota:

·         “Al frente del Cullen Poletti vio pasar tres gestiones de gobiernos provinciales. Tiene cintura para negociar, templanza para enfrentar los desafíos y el necesario conocimiento del dolor y las necesidades de los que menos tienen, esos que llegan a diario al hospital en busca de salud. Tiene sensibilidad. Es por esto, entre otras cualidades antes mencionadas, que todos lo quieren ‘en su equipo’”.

Este caso de Poletti no es nuevo ni el único para los santafesinos, en cuando a personas reconocidas (o muy conocidas) por la sociedad que jamás participaron en política, pero aprovechando su popularidad se convirtieron en “paracaidistas” bajo el cartel de “la nueva política” (o sea: políticos de la no-política... aunque suene inentendible).

Se puede hablar de Carlos Reutemann (ex piloto de Fórmula 1), Amalia Granata (mediática?), Emilio Jatón (ex conductor de Noti 13), Eduardo González Riaño (comentarista deportivo de Noti 13), Martha Fassino (conductora de Noti 13), Fernando Fleitas (nadador), Enrique Muttis (lector de noticia en Noti 13 –aunque había ocupado un cargo importante durante la dictadura cívico-militar), Marcos Kaniche Castelló (cantante de cumbia)...

De todos estos citados, poco y nada se ha podido rescatar. Excepto algunos hechos valorables de la primera gestión de Reutemann (que posteriormente terminó sin poder caminar con tranquilidad por las calles santafesinas), todo ha sido olvidable. Muy pobre.

Resultaría interesante que Poletti tuviera en cuenta ello (Zapatero a tus zapatos...?).