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Opinión

URUGUAY: APENAS A 20 MESES… (Jorge A. Molinari)

URUGUAY: APENAS A 20 MESES… (Jorge A. Molinari)

MONTEVIDEO-URUGUAY (por Jorge Aniceto Molinari)  (Abordando eso gris, que parece la teoría).

Ante una carta del compañero Dr Marcos Carámbula, que dice:

"Apenas a 20 meses...

Queridos compañeros (as) frenteamplistas, aquí una reflexión desde la experiencia de aquel 5 de febrero de 1971 y la esperanza. Que no nos distraigan, por el bien del pueblo uruguayo, son apenas 20 meses que nos faltan para volver.

En 2005 iniciamos un proceso de transformación de nuestra patria, insuficiente, incompleto, con errores, pero con grandes puntales. Sistema integrado nacional de salud, Plan Ceibal, Sistema nacional de cuidados, más recursos a la educación y acceso de la primera infancia a la enseñanza, apoyo a la universidad en su proceso descentralizador, miles de estudiantes hijos de trabajadores que ingresaron al nivel terciario, apoyo a la ciencia y a la investigación, reconocimiento de derechos de los trabajadores –y en particular de las trabajadoras domésticas y trabajadores rurales–, negociación colectiva, responsabilidad penal empresarial, aumento del salario real, descentralización y transparencia en los recursos a todas las intendencias del país, creación de los municipios, soberanía energética, matrimonio igualitario, legalización de la marihuana, ley trans... y podríamos seguir.

Nos faltó resolver la vulnerabilidad social extrema, la precariedad en la vivienda, los asentamientos. Redujimos la pobreza, la indigencia, pero ahora nos golpea con más fuerza.

No resolvimos la reforma de la seguridad social, la reforma de la caja militar.

No cruzó todo nuestro planteo de desarrollo productivo una mirada profunda sobre nuestros recursos naturales, sobre nuestra principal fortaleza: la soberanía alimentaria, la defensa de los pequeños y medianos productores familiares, aunque hay caminos abiertos y deben ser profundizados.

No voy a analizar, porque es explícito: la coalición de gobierno vino con un plan y lo está cumpliendo con sus mayorías parlamentarias: la Ley de Urgente Consideración (LUC), la reforma de la seguridad social, la reforma educativa, la privatización del puerto, la pérdida progresiva de los planes sociales, de los planes de salud, de los recursos para la Universidad de la República, para la ciencia, para la investigación.

En tres años de gobierno han sido muy explícitos en la aplicación conocida de su ideología, que viene, como lo estudia Gerardo Caetano, desde principios del siglo XX: el liberalismo conservador.

Más allá de todas las campañas y artículos que defienden la gestión del gobierno, nuestro pueblo maduro nos dará una segunda oportunidad para seguir avanzando.

Nuestro proyecto, como bien lo definió nuestro presidente, el querido compañero Fernando Pereira, en el formidable acto de Parque del Plata en el 52 aniversario del Frente Amplio, es un proyecto colectivo.

Yo no puedo olvidarme mientras viva de cuando, apenas con 23 años, vi sentados en la mesa de la antesala del Palacio Legislativo a Zelmar Michelini, a Juan Pablo Terra, a Rodney Arismendi, a José Luis Massera, a José Pedro Cardoso, a Francisco Rodríguez Camusso, al general Arturo Baliñas, a los independientes de Marcha liderados por Carlos Quijano, Julio Castro, a Héctor Rodríguez, a Alba Roballo, que con seriedad y dignidad republicana firmaron el nacimiento del Frente Amplio aquel 5 de febrero de 1971. Nos sobrecogía a todos los que ahí estábamos presentes una emoción indescriptible porque sentíamos que estábamos asistiendo a un gran paso del pueblo oriental.

La elección de 2024 será ideológica, entre un modelo de liberalismo conservador una vez más y un modelo de sociedad solidaria, respetuosa hacia los otros, de equidad, de República, de democracia.

Cómo olvidarnos de aquel 26 de marzo del 71, cuando llegábamos desde distintos puntos a la Explanada Municipal y nos encontrábamos conmovidos hasta las lágrimas con la multitud que acompañaba a aquellos hombres y mujeres proclamando la fórmula que encabezaba Líber Seregni a la Presidencia, Juan José Crottogini a la vicepresidencia y Hugo Villar a la Intendencia Municipal de Montevideo.

Levantemos la mira, queridos compañeros, como siempre nos pidió Seregni. Lo nuestro es un proyecto colectivo. Bienvenidas siempre las personalidades y sus prestigios, como en aquel momento lo fueron aquellas grandes personalidades, como lo fueron luego Tabaré Vázquez, José Pepe Mujica, Danilo Astori, Mariano Arana, y bienvenido el rol de los partidos con sus diferencias y acuerdos. El Frente es construcción colectiva desde el pie, desde la cercanía, desde la sensibilidad, desde el encuentro del sentir de la sociedad toda que nos muestra su pujanza. Veremos ahora un 8 de marzo formidable por los derechos a conquistar en la igualdad de géneros, veremos un 20 de mayo seguir reclamando por verdad, justicia y memoria, vemos a nuestros científicos que jugaron un rol fundamental en la pandemia y que optan por quedarse en el país porque creen en la ciencia y en la investigación como palanca de desarrollo.

Asistimos a un magnífico 18vo Congreso del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) que recordó los 50 años de la huelga general convocando al Congreso del Pueblo y afirmando la unidad de los trabajadores de América del Sur.

Abracemos el derecho a la cultura como tema central de desarrollo de valores, de fraternidad, de solidaridad, de convivencia que atraviese todos nuestros programas.

Afirmemos un Uruguay y un mundo de paz junto a esta América del Sur que desde Colombia a Brasil proclama la paz y la defensa del ambiente.

Escuchemos el clamor del planeta, que estalló en la pandemia pero que nos advierte que este modo capitalista de producción y explotación indiscriminada de nuestros recursos nos lleva al colapso.

América del Sur debe pararse unida, junto a Brasil, Colombia, Bolivia, defendiendo nuestros recursos naturales, la Amazonia, los bosques, los recursos hídricos, minerales.

Ese es nuestro camino, no el micrófono rápido o el Twitter tempranero, o el desmarcarse, o las acciones individuales, no es el perfilismo al que nos llevan y buscan una y otra vez los medios de la derecha; cada uno de nuestros futuros y extraordinarios candidatos/as emergentes se va a afirmar en la medida en que el Frente todo avance colectivamente pensando en los grandes desafíos que definiremos en nuestro próximo congreso. La elección de 2024 será ideológica, entre un modelo de liberalismo conservador una vez más y un modelo de sociedad solidaria, respetuosa hacia los otros, de equidad, de República, de democracia, de verdad, de paz.

Que se vuelvan a levantar, como lo dijo Lula ahora y el Frente hace 52 años, las banderas de la esperanza. Vaya para cada uno(a) de ustedes un apretado y fraternal abrazo.

Marcos".

Mi comentario:

Me tomo el atrevimiento desde mi humildad, de analizar este documento del compañero Dr. Marcos Carámbula.

No soy ajeno, participé en la fundación del Frente Amplio como antes en el de la CNT, la suerte quiso que esté en el centro de la foto que se toma como símbolo fundacional del Frente.

No se trata de credenciales, se trata de opiniones, y todas tienen valor, como decía Marx porque provienen de seres humanos.

Comparto todo, ¿pero que me preocupa?: el futuro, si, con 83 años me preocupa el futuro.

El Frente no pudo parar, no lo hubiera podido como país, el deterioro de las condiciones en todos los ámbitos del quehacer humano.

Hay normas del desarrollo universal del trabajo, de la salud, de la enseñanza, de la vivienda, que vienen pautadas por la crisis de la rentabilidad de los conglomerados empresariales que en pugna gobiernan el mundo y eso incide en los renglones que enumeramos.

El Frente hizo en 15 años en el gobierno nacional y de varios años en distintas Intendencias, con errores y hasta horrores, hizo lo que se podía hacer.

Tanto es así que el gobierno actual, en su plan de restricciones al gasto público, y a los ingresos de trabajadores y pasivos, no cambió lo esencial de la reforma de la salud,  de la reforma tributaria, y de las incorporaciones al avance de la educación pública como el Plan Ceibal por ejemplo.

Hay un hito que nadie reconoce como tal, ni siquiera su propio autor, que nadie sabe con quién lo consensuó y es la intervención de Mujica en la ONU en setiembre del 2013.

¿Por qué señalo esto?, porque precisamente allí están insinuadas las dos herramientas que el mundo deberá tomar inexorablemente para parar la escala bélica y revertir la crisis  en el desarrollo capitalista. Hoy el capitalismo se desarrolla aún con enorme potencia a través de la mayor zona de libre comercio de la historia, manteniendo el libre comercio y un nuevo centro del capitalismo mundial en cuyo vórtice está nada menos que dos países gobernados por Partidos Comunistas: China y Vietnam.

Los otrora imperialismos, abandonan el libre comercio, se repliegan a sus fronteras, emiten con cargo al resto de la humanidad y apelan a la industria de la guerra para equilibrar sus presupuestos.

En el resto del mundo estamos nosotros, y la lucha es porque nuestra gente no se sumerja más aún en la pobreza, bloqueados además por las pautas financieras que gobiernan Instituciones como el FMI, y que ya son insostenibles.

El capitalismo, su predominancia entra en una etapa donde debe morir en paz o peligra la humanidad toda. Estoy hablando del fin de la predominancia no del capitalismo como modo de producción que eso como antes con el feudalismo llevará a la humanidad muchos años aún y el desarrollo de Instituciones con plena vigencia de la democracia.

Y ahí está el problema, porque se piensa con cabeza de rentabilidad empresarial capitalista, que es lo que necesita morir en paz, y no se sustituye por una mentalidad de eficiencia y control social.

Mujica lo insinuó, y luego se quedó. Necesitamos desarrollar a nivel de organización social, política, sindical, religiosa dos herramientas que permitan cambiar esta situación: la moneda debe ser única y universal –basta de maniobras y ajustes con ellas-, los impuestos se deben cobrar sobre la circulación del dinero, dando muerte a los paraísos fiscales y a los sistemas impositivos basados en el consumo, los salarios y las jubilaciones.

La industria de guerra debe ser reconvertida y su aparato puesto al servicio de la humanidad, ahí están los mejores técnicos y salarios.

Esto permitirá ir al centro de la financiación de todas las lacras sociales.

¿Es una tarea pesada para nuestro Frente? Por algo Mujica retrocedió y nunca volvió a hablar de su discurso en la ONU.

Pesada tarea fue construir la unidad en una Central Sindical, enfrentando intereses empresariales disimiles, pesada tarea fue construir un Frente Político con compañeros procedentes de las más diversas corrientes, pero se logró.

Pero no hay otro camino posible, y en el mundo hay miles y miles de seres humanos que legítimamente pueden comprender y compartir lo que estamos planteando.

Un mundo mejor no solo es posible es cada vez más necesario.