MILANO-ITALIA  (PrensaMare)  La afirmación del presidente Donald Trump que el ataque por él ordenado que asesinó a iraníes e irakíes, hace que los estadounidenses ahora estén más seguros (¿?), es cada vez menos creíble para dirigentes y la sociedad estadounidenses. Esta decisión de Trump está aislando cada vez más a su país y a la vez po expone como vulnerable. Tanto es así que Irán respondió con un ataque con misiles a 2 bases USA en Irak. Y Trump buscó ignorar el mismo, afirmando que los iraníes renunciaban al militarismo (¿?).

Se sabe que los daños y bajas en esas bases han sido de importancia, pero tanto Trump como sus colaboradores mantienen un gran secretismo. Tanto que el secretario de Estado Mike Pompeo le dijo a CNN que no era “relevante” para él revelar cuán inminentes eran los ataques contra los intereses estadounidenses (¿?).

Pero además, mientras Trump le reclama a los firmantes del acuerdo nuclear con Irán que lo desconozcan, las autoridades iraníes anunciaron que ya no cumpliría con las restricciones a su enriquecimiento de uranio que tenía con el acuerdo nuclear de la era Barack Obama. Ello es consecuencia directa de la agresividad trumponiana.

Mientras tanto, el Parlamento de Irak votó para expulsar a las tropas estadounidenses. Otra dura consecuencia, que afectaría la presencia invasora y su influencia en la región.

Pero por otra parte, si alguien desde Washington apostaba a esmerilar el poder del gobierno iraní (a nivel interno y regional), ello ha resultado totalmente contrapuesto. El criminal atentado contra Soleimani ha hecho que en amplios sectores iraníes y de países árabes se solidarizaran con el gobierno.

Inclusive los aliados europeos de Washington se distanciaron del criminal asalto y crímenes de Trump. Pero si faltaba algo como para desacomodar las mentiras estadounidenses, el mismísimo primer ministro de Irak Adil Abdul Mahdi dijo que tenía previsto reunirse con Soleimani el día en que fue asesinado. Un encuentro que tenía como fin el tratar de rebajar las entre Irán y Arabia Saudita. Un tema que es de vital importancia y deja presente el interrogante de su el crimen de dicho general iranía no tuvo (precisamente) el fin de evitar cualquier posibilidad de pacificación regional…

A todo ello se agregó un atentado en Kenya. Allí, 3 estadounidenses fueron asesinados en un ataque a una base militar por Al-Shabaab (grupo yihadista). Si bien estos terroristas de línea sunita del Islam, están alejados de Irán (que tiene una mayoría musulmana chiíta), el hecho demuestra que EEUU puede ser vulnerable.

Pero si algo…: ha sorprendido al mundo ha sido las declaraciones y amenazas de Trump en el sentido que atacaría sitios “culturales” en Irán si respondienra al crimen de Soleimani. No se trata de un hecho menor, pues atacar sitios culturales (como un monumento religioso o histórico) además de constituir una inmoralidad, significa poner en peligro a civiles, violar tratados internacionales y hasta –es posible- se puede considerar un crimen de guerra.

Acaso Trump piensa que amenazar con destruir sitios culturales le sumarán apoyos, adhesiones o respaldos…?

Pero por cierto que Trump es coherente con su pensamiento y accionar. Por ello no dudó en amenazar al gobierno de Irak con imponerles sanciones estrictas si las invasoras tropas estadounidenses se veían obligadas a irse.