EL CAIRO-EGIPTO  (PrensaMare)  El tema de Amer Al-Fakhouri (foto: junto a Donald Trump) llevó al secretario general de Hizbullah, Sayyed Hassan Nasrallah, a hablar.

Analizó los acontecimientos, señalando que el enemigo y los opositores están tratando de socavar la confianza entre la Resistencia y su pueblo, lo que constituye un legítimo vínculo. “No tenemos conocimiento de la existencia de un acuerdo o arreglo detrás de la liberación del agente Amer al-Fakhouri, y lo que sí sabemos es que no existe tal arreglo”, agregó.

Explicó que tras producirse la detención del agente Al-Fakhoury, se produjeron presiones estadounidenses sobre funcionarios y dirigentes del Estado libanés. Exponiendo que el objetivo era lograr liberar adicho agente y criminal.

Fueron meses de presiones, donde las autoridades del Estado libanés discutieron Hizbullah la situación ante las constantes amenazas estadounidenses. Consideró que la libertad del agente “abrirá la puerta para que el estadounidense imponga lo que quiere en el futuro. Este es un problema de soberanía y de Resistencia”.

Agregó que “los estadounidenses intentaron sacar ilegalmente a Al-Fakhouri a través del aeropuerto de Beirut, pero las autoridades de seguridad pertinentes se negaron a permitirle habiendo sentencias contrarias”. Citó que el poder judicial apeló el fallo, y hubo un juez que emitió una decisión judicial de prohibición de viaje. “Pero a pesar de eso, los estadounidenses lo sacaron en un ataque flagrante contra la soberanía libanesa”, apuntó.

Señaló que desde el primer día del arresto de Al-Fakhouri, “nos negamos a retirar los cargos en su contra y exigimos un fallo justo”. Indicó que “no teníamos conocimiento de la sesión del Tribunal durante la cual se emitió la decisión de liberar a Al-Fakhouri”.

“Muchas de las decisiones del Tribunal Militar y del aparato judicial en el Líbano no nos son conocidas y no interferimos con ellas… El gobierno nunca es ni será el gobierno de Hizbullah, las decisiones las toma el gobierno, algunas de las cuales hemos aprobado y otras a las que nos hemos opuesto”.

Mientras tanto, Al-Fakhouri es un prófugo buscado por el poder judicial libanés. Y sobre ello opinó poner “nuestra ira contra el estadounidense que sacó de manera oculta e ilegal al agente criminal y asesino en violación de todas las leyes”.

“No somos nosotros los que hemos creado un escenario ilegal en El Líbano, sino fue Estados Unidos quien impuso el escenario a El Líbano, y sacó al agente por una vía ilegal y todos los que guardan silencio sobre este hecho no tienen derecho a hablar sobre los cruces ilegales y deberían estar avergonzados… El estadounidense tiene influencia sobre las instituciones del estado libanés y tiene individuos en El Líbano que trabajan para ellos, y con ellos a veces activa esta influencia”, agregó.

Señaló que Al-Fakhouri debe ser considerado un prófugo de la justicia, y la responsabilidad aún se no ha eliminado. El caso “Ha sido una afrenta para El Líbano”.

El caso…: de Amer Al-Fakhouri, refiere al libanés que pertenecía al Ejército del Sur del Líbano, una milicia que colaboraba con Israel durante la ocupación de dicho país (1982-2000). Luego se fue a Israel y EEUU. Fue Director de la cárcel de Khiam (sur libanés) donde torturaba y maltrataba a miles de presos colaborando con el régimen israelí.

La justicia libanesa en 2019 lo acusó de asesinato e intentos de asesinatos; incluye también tortura y secuestro contra miles de libaneses. El denunciado había ingresado en Líbano en septiembre de 2019. En la causa, la jueza interviniente pidió la condena de pena de muertes.

Inesperadamente el tribunal militar decidió levantar los cargos en contra del criminal. Tras ello, él se dirigió a la embajada de EEUU en Beiruth. Allí fue subido a un helicóptero (llegado desde Chipre), que lo sacó del país, y posteriormente fue remitido a EEUU (él además de libanés es ciudadano estadounidense).

Hizbullah no fue informado ni consultado sobre la liberación del llamado “Carnicero de las tiendas”.