SANTA FE-ARGENTINA (por Rodolfo O. Gianfelici, PrensaMare)  Algunos medios de prensa informaron el viernes 23 de febrero de 2024 que desde el FMI le comunicaron al presidente Javier Milei que estaban preocupados por un posible “estallido social”.

Quien se encargó de esta comunicación fue la Subdirectora del organismo, Gita Gopinath. Lo llamativo (o no tanto), pero que demuestra el cinistro y la crueldad de quienes conducen el mismo es que ellos mismos han planteado las exigencias, extorsionando y han apoyado lo hecho por el mandatario argentino.

Desde el gobierno niegan esa posibilidad conflictiva pues –afirman- cuentan con una base del 56% del electorado que voto a Milei. Inclusive es tanta la preocupación, que la segunda de Kristalina Georgieva también se lo manifestó al Ministro del Interior, Guillermo Francos, y el Jefe de Gabinete, Nicolás Posse.

Pero el poder fondomonetarista es tan profundo, que la visitante también mantuvo encuentros con sindicalistas y empresarios. Allí las opiniones fueron dispares. Mientras los primeros anticiparon que habrá protestas, paros y huelgas, los segundos entendieron que se marcha con buen rumbo y que se debe profundizar (¡).

Sucede que los informes que le han provisto desde Washington al FMI dan cuenta de una situación delicada en el país. Para colmo, se explayaron sobre las internas del gobierno, donde el propio mandatario aparece como un “observador”; un twittero; un ‘respondedor’; una persona alejada de su función (¡).

Donde citaron que diferentes grupos de poder político-administrativo confrontan en medio de un gobierno que acumula frentes de confrontación. Fue así que citaron al FMI una situación del gobierno argentino actual que –posiblemente- ni el propio Milei tenga conocimiento de la existencia: Enumeraron la presencia de diferentes ‘sectores internos’:

• El liderado por la hermana Karina Milei (la tarotista-asesora)
• El conducido por Ministro de Economía, Luis Caputo (ligado a Mauricio Macri)
• El que representa la vicepresidenta Victoria Villarruel (relacionado con sectores militares, de Inteligencia y ultraerechistas)
• El organizado por Federico Adolfo Sturzenegger (relacionado con Macri, el poder financiero internacional y multinacionales)
• Los mileistas que funcionan “a reacción” apelando a redes sociales y el apoyo de los medios de comunicación
• El llamado ‘bando de Inteligencia’, que es una herencia de lo armado por Mauricio Macri siendo presidente que se reavivó y efectúa tareas de espionajes internos (‘pasando’ información a tal o cual funcionario nacional y/o legislador, según le convenga a la estrategia de Macri para convertirse en el único apoyo político de un Milei desencajado, inoperante y acorralado)
• Los radicales que no logran conformar una fuerza unificada, pero que pretenden construirla para evitar que Macri ‘se quede’ con todo el gobierno (aca el poder se diluye entre dirigentes partidarios sin cargos; gobernadores radicales; legisladores).

A ello se le debe agregar la pelea que ya nadie disimula entre los ministros Caputo y Sandra Petovello (de Capital Humano). Inclusive ella misma –una inoperante e inexpeta suprema- cuyo mayor ‘antecedente’ podría ser el de haber sido novia del actor Pablo Rago...-, ha sido objeto de espionajes.

En el FMI preocupa el avance del aislamiento político de Milei; no por él, sino porque ello podría significar un disgusto para los objetivos ajustadores y de empobrecimiento que ellos llevan adelante en el país.

La situación la ven tan delicada que les llama poderosamente la atención la soledad elegida y en que se mueve el mandatario, sin percatarse que sin alianzas políticas, su propuesta será puesta en riesgo.

La mejor muestra de la preocupación del FMI, de la inoperancia de Milei y de no poder comunicar lo realmente hablado en las reuniones estuvo en el mismísimo mensaje de Gopinath en su texto en red social X:

• "Excelente reunión con el Presidente Milei"
• (se habló) "sobre la mejor forma de sacar el país adelante".

O sea: Nada de nada. Simple hipocresía.

Mientras tanto, Caputo busca obtener un nuevo acuerdo de desembolso de dinero. Pero desde el organismo le dijeron que no. Que ello será posible una vez que se termine el actual. Pero Caputo dice que para llegar a buen puerto –a largo plazo- necesita que el FMI le preste al país unos U$S 5.000 millones.

El tema es que en el FMI ya lo conocen a Caputo...

Mientras tanto el empobrecimiento generalizado avanza; y el gobierno –como ya citáramos en trabajos anteriores- funciona en ‘piloto automático’.

Para destacar sus “virtudes” (¿?) Caputo ha dicho que "la reunión (con el FMI) fue muy buena. Lo que estamos haciendo es más de lo que ellos hubieran imaginado. Los resultados están llamando la atención fuertemente" (¿?). Pero lejos de ello, en el organismo son cautos y observan de reojos a un funcionario al que en cualquier gobierno razonable o serio solo le hubiera alcanzado para ser un simple asesor de tercer o cuarto nivel; pero que con Macri (antes) y con Milei (ahora) han entronizado como un experto y conocedor de la macroeconomía. Lejos de ello, Caputo es apenas un simple ‘timbero’ de las finanzas, que usa el poder estatal y sus contactos con la usura internacional para negocios de clase, a costa de hipotecar al país.

Nota:

El anticipo sobre esta situación se publicó en: “Blinken, de recorrida y presionando (Rodolfo O. Gianfelici)", del 20-2-2024: https://www.prensamare.com.ar/adm/noticias-frm.php?action=edit&id=18899 .