Vie. 26. Jul 2024, Santa Fe - Argentina
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GUERRA ENTRE ISRAEL Y HAMAS UN PROBLEMA AMBIENTAL (Carlos P. Morales)

GUERRA ENTRE ISRAEL Y HAMAS UN PROBLEMA AMBIENTAL (Carlos P. Morales)

JUNCOS-PUERTO RICO (por Dr Carlos Pérez Morales, Geógrafo/HistoriadorEl término ambiente se refiere a las  condiciones y circunstancias que rodean a las personas, animales o cosas. Incluyendo elementos bióticos, como las plantas y no bióticos, como las rocas. En muchos países se han tomado medidas legales para proteger el ambiente.

Cuando ocurre una guerra o conflicto militar, el ambiente se contamina como en la Franja de Gaza, donde Israel ha destruido casas, comercios. hospitales. escuelas y otros edificios.

Las emisiones de calentamiento del planeta generadas durante los primeros dos meses de la guerra en Gaza fueron mayores que la huella de Carbono anual de más de 20 de las naciones más vulnerables al clima del mundo. La gran mayoría (más del 99%) de las 281.000 toneladas métricas de Bióxido de Carbono (equivalente a CO2) que se estima se generaron en los primeros 60 días posteriores al ataque de Hamás del 7 de octubre, pueden atribuirse al bombardeo aéreo y a la invasión terrestre de Gaza por parte de Israel, según a un análisis único en su tipo realizado por investigadores del Reino Unido y EE. UU.

El análisis, que aún debe ser revisado por pares, incluye el CO2 de las misiones de aviones, tanques y combustible de otros vehículos, así como las emisiones generadas al fabricar y explotar bombas, artillería y cohetes. No incluye otros gases que calientan el planeta como el metano. Casi la mitad de las emisiones totales de CO2 se debieron a aviones de carga estadounidenses que transportaban suministros militares a Israel.

El excepcionalísimo ambiental de los militares les permite contaminar con impunidad, como si las emisiones de carbono que escupen sus tanques y aviones de combate no contaran. Esto tiene que parar para abordar la crisis climática necesitamos rendición de cuentas”, añadió Neimark, quien se asoció con investigadores de la Universidad de Lancaster y el Proyecto Clima y Comunidad (CCP), un grupo de expertos en política climática con sede en Estados Unidos.

Los cohetes de Hamás disparados contra Israel durante el mismo período generaron alrededor de 713 toneladas de CO2, lo que equivale aproximadamente a 300 toneladas de carbón, lo que subraya la asimetría de la maquinaria de guerra de cada lado.

Los efectos ambientales de la guerra, desde la contaminación de las aguas subterráneas y del suelo hasta la destrucción de los olivos de Gaza, tendrán impactos devastadores mucho después de que cesen los bombardeos. (Frank, ?, (January 16.2024),

Como resultado de que Israel le cerró el agua potable a la Franja de Gaza, los gazaitíes toman agua de pozo sin potabilizarla, por lo tanto la misma está contaminada. (Lakhani, January 2024). Las aguas residuales contaminadas representan una amenaza potencial para la agricultura, ya que las toxinas pueden filtrarse en el suelo e impactar negativamente las prácticas agrícolas.

Un estudio llevado a cabo por Mayra y Rakefet Shafran-Nata y Shafran-Natan, señaló que el objetivo es resaltar los peligros potenciales en estos ámbitos, enfatizando los posibles riesgos para la salud pública y la resiliencia de la población de la zona fronteriza de Gaza.