CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA (PrensaMare)  En el juzgamiento de represores por los vuelos de la muerte, condenaron a cadena perpetua a cuatro exmilitares.

Lo dispuso el Tribunal Oral Federal 2 de San Martín. Todos los condenados cumplían funciones en Campo de Mayo durante la dictadura; cumplirán sus penas en cárceles.

Los operativos consistían en arrojar vivos y drogados al mar a detenidos desaparecidos que estaban en centros clandestinos de detención (CCD), como los que funcionaron en la exEscuela de Mecánica de la Armada (Esma), el más grande del país, o en Campo de Mayo.

La condena fue contra el ex jefe de Institutos Militares de Campo de Mayo Santiago Omar Riveros; el ex comandante del batallón Luis del Valle Arce; su segundo, Delsis Ángel Malacalza, y el exoficial de operaciones de esa dependencia, Eduardo María Lance.

Los condenados –por orden del Tribunal- serán revisados para determinar su estado de salud -quienes cumplen prisión domiciliaria- para determinar si están en condiciones de ir a una cárcel común a cumplir la sentencia, como lo pidió la Fiscalía.

En 2017 la Justicia...

Había condenado por los "vuelos de la muerte" a una treintena de acusados, varios de ellos a perpetua, entre los que sobresalían los excapitanes Alfredo Astiz y Jorge El Tigre Acosta.

En el juicio de San Martín se debatieron los vuelos que perpetró el Ejército. Los acusados cometieron privación ilegal de la libertad agravada por mediar violencia o amenazas, imposición de tormentos agravada por haber sido cometida en perjuicio de perseguidos políticos en forma reiterada, homicidio doblemente agravado por su comisión con alevosía y con el concurso premeditado de dos o más personas.

Los casos abordados fueron los de Rosa Eugenia Novillo Corvalán, Roberto Ramón Arancibia, Adrián Enrique Accrescimbeni y Juan Carlos Rosace. Fueron secuestrados entre 1976 y 1977, las trasladaron al centro clandestino de detención "El Campito" (en Campo de Mayo) y allí las torturaron. Finalmente las subieron a aviones y las arrojaron al mar o al Río de la Plata.

Los cuerpos de las víctimas aparecieron en la zona de Punta Indio, a 150 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires, en la costa Atlántica.