CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA (PrensaMare)  Estela de Carlotto nuevamente encabezó un acto, anunciando el hallazgo del nieto 132 (a solos 6 días de haber dado a conocer el 131).

Se trata de Juan José Morales, que reside en Tucumán y es hijo de Mercedes del Valle Morales, secuestrada el 20 de mayo de 1976, asesinada y enterrada en una fosa clandestina.

Acompañaban a Carlotto, su hija Claudia Carlotto, titular de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi), la Abuela Buscarita Roa y Abel Madariaga, Secretario de la organización.

También el fiscal Pablo Parenti, titular de la Unidad especializada para casos de apropiación durante el terrorismo de Estado; y Horacio Pietragalla Corti, Secretario de Derechos Humanos de la Nación.

“Quisiera transmitir mi agradecimiento a Abuelas de Plaza de Mayo y al Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), que me posibilitó reencontrarme con los restos de mi mamá y darle sepultura”, dijo Juan José de 47 años.

El anuncio...

Se hizo en el predio del Espacio Memoria y Derechos Humanos (ex-ESMA). La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner expresó: “¡Las Abuelas lo hicieron de nuevo Gran alegría por la restitución de la identidad de otro argentino, el nieto 132”.

Mientras que el presidente Alberto Fernández también felicitó: “La restitución de la identidad de cada uno de ellos nos genera una profunda emoción y alegría. Gracias por esta lucha incansable, queridas Abuelas”.

Mercedes del Valle Morales...

Tenía 21 años y un hijo de 10 meses cuando la secuestraron el 20-5-1976 en Monteros (Tucumán); era militante del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). Junto con ella se llevaron ese día a su padre, José Ramón Morales, y a su madre, Toribia Romero de Morales. Cuatro días después secuestraron a sus tres hermanos: José Silvano, Juan Ceferino y Julio César Morales.

El bebé fue dejado...

Con su documento en poder del dueño de una finca en la que trabajaba Mercedes del Valle Morales. En 1981, este hombre fraguó una adopción. Tras morir los dos apropiadores, los hermanos de crianza le dijeron que no era hijo biológico (de quienes lo criaron y le entregaron un documento en el que figuraba el nombre de su madre).

Él ya tenía sospechas desde antes; por ello en 2004 se acercó a Abuelas y a la Conadi. Cuatro años después, el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) informó que su muestra era compatible con la de sus tíos maternos.

Juan José aportó su sangre y ésta sirvió para que el EAAF identificara los restos de su mamá, que había sido enterrada en una fosa clandestina en el Cementerio del Norte.

Igualmente existían dudas...

Por ello en 2018, Juan José se presentó para hacer la denuncia ante el Ministerio Público Fiscal de Tucumán. El 27-9-2022 se exhumaron los restos del apropiador y no tenía vínculo biológico con él. Ahora Juan José buscará a su padre. Él fue sustraído y apropiado, mientras qur toda la familia fue asesinada.