CIUDAD DE PANAMÁ-PANAMÁ Palabras de Julio Yao en la misa de cuerpo presente de Ivan Broce. Iglesia de Condado del Rey.
Las familias Broce y Yau siempre estuvimos hermanadas. Carlos Broce o “Paddy” y mi hermano Carlos e Ivan y yo empezamos a andar a principios de los años 50. Viajamos frecuentemente a Pedregal de caceria donde el señor Henriquez, un martiniqueño que trabajo en el Canal y nos quería como un padre. Enseguida se nos unió Zosimo Wong Broce, primo de Ivan. Nos unía el amor a la naturaleza y a la vida sana. Pronto viajamos a selvas vírgenes en Carriazo, San Miguel de Pacora, Altos de Pacora y Tres Brazos, abundantes en pavos, puercos de monte y tigres. Las estrellas eran nuestro guía en las noches. La Naturaleza se nos pegó al alma y jamás nos abandonó. Decíamos que seguramente éramos los jóvenes más sanos de todo Panamá, no solo en salud física sino mental, en patriotismo.
Ivan era nuestro líder natural. Se hizo Visitador Médico, farmacólogo y fue Director de Farmacia en la Caja de Seguro Social de Villa Cáceres, entre otras. Incursionó en la pesca submarina y cuando no en el mar o en Otoque, aparecía en el Río Chagres, siempre vinculado a la naturaleza; sobre todo ahora cuando sus cenizas vayan al mar, y del mar regresen al Darién, la “patria chica” de Ivan.
Con Ivan incursionamos en el automovilismo deportivo. Recuerdo cuando en 1973 participamos en un Rally de Panamá a Costa Rica, pasando por Azuero. Ivan era mi copiloto. Rumbo a David, por Gualaca, estábamos retrasados pues no teníamos computadora como los demás; dependíamos de la agilidad mental de Ivan, y mi escarabajo VW de 1967 alcanzó las 100 millas por hora, llegando en cuarta posición entre 27 autos mucho más potentes.
El 9 de enero de 1964, Zosimo Wong, mi hermano Carlos, Ivan y yo logramos hacer que un avión abandonara nuestro espacio aéreo y aterrizara forzosamente en Albrook Field, Zona del Canal.
Honremos a Ivan Broce Cabarcas, ciudadano ejemplar, sencillo y campechano, amante de la buena comida y la tertulia, en la que era diestro en todo tema. Sobre todo, brindemos por Ivan, ¡que llevó en su corazón los ríos, mares y selvas de nuestra Patria
