SANTA FE-ARGENTINA  (por Esteban D’Arret, PrensaMare)  Desde que el peronismo es gobierno –a partir de diciembre de 2019-, el sector que representa la vicepresidenta Cristina Fernández ha dado suficientes muestras de aportes al mantenimiento de la unidad interna (del Frente de Todos).

Y si se presentaron diferencias con el presidente Alberto Fernández (y que las hubieron), todo quedó puertas adentro.

El tema es que el mandatario se ha dedicado a destratar y ningunear a Cristina Fernández; además de buscar avanzar sobre el sector que ella lidera.

Lo peor (o más grave) llegó con el tratamiento y discusión con el FMI. Inclusive, ni ella ni el titular del bloque de diputados nacionales del Frente de Todos (Máximo Kirchner) fueron informados de determinados puntos que se negociaban con tal organismo. Se anoticiaron de ello cuando el Ministro de Economía Martín Guzmán se lo informó a los gobernadores.

De allí que llegado el momento, Kirchner dio un paso al costado. Informando a la sociedad que lo que tuvo que decir al respecto (sobre la discusión) se lo dijo personalmente a Fernández. Su alejamiento era entendible: no podía salir a defender y a tratar de lograr los votos para la apobación (del acuerdo) del cual él no estaba de acuerno, ni totalmente anoticiado.

Tras la renuncia de Kirchner, el mandatario se reunió con el titular de Diputados –Sergio Massa- y consideraron que el mejor para conducir el bloque era el rosarino Germán Martínez.

El tema es que el mismo está enrolado con la corriente que lidera el santafesino Agustín Rossi. Dirigente que está totalmente enfrentado con el gobernador Omar Perotti, y que –autoconsiderándose como un “kirchnerista”-enfrentó en las elecciones Paso a la lista que respaldó... Cristina.

Esta decisión de Fernández no fue casual o hecha con desconocimiento del territorio provincial. Y si alguno tenía dudas, ahora ha sumado a Roberto Sukerman al Ministerio de Trabajo (que conduce Carlos Moroni), al cargo de Jefe del Gabinete de dicha cartera laboral.

Sukerman fue ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social en el primer tramo de la gestión de Perotti y luego pasó luego al Ministerio de Gobierno.

De esta forma el entretejido político de Fernández (con vistas al 2023) avanza, en forma paralela al del sector que lidera la vicepresidenta. Ahora decididamente metido en la interna del peronismo santafesino, donde ya Sukerman (con el respaldo de Rossi) está lanzado a competir por la intendencia de Rosario en el 2023.