ULÁN BATOR-MONGOLIA (Especial para PrensaMare) El papa Francisco llegó el viernes al país, siendo así el primer pontífice que realiza una visita con el objetivo de dar ánimos a la pequeña comunidad católica, de cerca 1.400 personas. El viaje se extendió por 9 horas y media de vuelo.
Arribó al Aeropuerto internacional Chinggis Khaan y fue recibido por la ministra de Asuntos Exteriores, Battsetseg Batmunkh. Allí una joven le ofreció yogur seco, una usanza típica del país, y después se reunieron durante algunos minutos en una sala del aeropuerto.
Tras ello, Francisco se fue a descansar a la prefectura, la residencia del prefecto de Ulán Bator, el cardenal Giorgio Marengo, ya que el Vaticano no cuenta con una nunciatura (embajada) en el país.
Durante el viaje, el papa destacó que venía a visitar a un pueblo pequeño que vive en un territorio enorme, "pero con una gran cultura" y pidió reflexionar sobre el silencio de las estepas porque dijo que "Mongolia se entiende con los sentidos".
Francisco se reunirá con el clero en la catedral de San Pedro y Pablo, construida en el siglo XX con una estructura que recuerda a las yurtas (las típicas tiendas circulares de Asía central construidas así para refugiarse del frio y los fuertes vientos de las estepas), y donde se encuentra una estatua de la Virgen encontrada por una mujer entre la basura años atrás, luego entronizada y venerada como Madre del Cielo.
El domingo celebrará una misa en el Steppe Arena para los 1.500 fieles residentes en Mongolia, el 90% viven en la capital, pero también se unirán otros mil fieles procedentes de diversos países vecinos como Rusia, China, Tailandia, Kazajstán, Kirguizistán, Azerbaiyán y Vietnam.
También liderará un acto ecuménico e interreligioso en el Hun Theatre en el que participarán representantes del chamanismo, el sintoísmo, el budismo, el islam, el judaísmo, el hinduismo y otras confesiones. Tiene programado para el lunes, inaugurar la Casa de la Caridad, un lugar para dar cobijo y ayuda a los más necesitados en el país, donde un 36% de la población que vive por debajo del umbral de la pobreza.
