SALTA y SANTA-ARGENTINA (PrensaMare)  Las duras medidas adoptadas por la presidencia de Javier Milei obliga a los argentinos a buscar la forma de defender sus recursos.

Arroz y azúcar son los productos más requeridos por la población argentina en la zona fronteriza en Bolivia, en razón que la diferencia de precios es importante.

Suele verse cómo constantemente argentinos cruzan la frontera en Salvador Mazza (provincia de Salta) a Pocitos y Yacuiba (Bolivia), para aprovisionarse de productos de primera necesidad a mejor precio.

La situación está provocando una crisis en el comercio de Salvador Mazza, donde se comprueba una caída del 50% del consumo. Ocurre que la diferencia de precios oscila entre un 30% y 40%.

No se trata de “contrabando”; se trata de compras ‘de a kilo’; solo para el consumo familiar.

Los comerciantes de Salvador Mazza comparan las ventas de inicios de diciembre con las de marzo y el balance es totalmente en rojo. Desde la Cámara de Comercio de dicha localidad se indicó que la devaluación del peso argentino fue un gran factor que afectó el comercio de frontera.

También se considera que la caída de las ventas se ha extendido a numerosos productos porque las familias priorizan unos consumos sobre otros. De allí que se paralizaron las ventas de colchones, frazadas, productos de blanco (el hogar). También han destacado que el congelamiento de salarios es otra de las causales de la paralización declientes.

Un dato que no deja de llamar la atención es que los productos bolivianos también se están vendiendo en localidades argentinas como Aguaray ( 23 km de la frontera) y Tartagal (a 52 km); entre los más vendidos se encuentran fideos, arroz y azúcar.

Una comparativa presenta:

·         Kilo de arroz en Argentina $ 2.200

·         Kilo de arroz en Bolivia                   $ 900

·         Kilo azúcar en Argentina                $ 1.200

·         Kilo de azúcar en Bolivia                $ 800

Un relevamiento realizado entre la Cámara de Comercio y la municipalidad de Salvador Mazza, determinó la existencia de 1.500 comerciantes (entre grandes y chicos). Desde que comenzó el año ha comenzado a notarse un cierre de comercios en forma constante; posiblemente sean los que se encoentraban en peores condiciones comerciales o de registro, y al caerse las ventas, directamente les resulta imposible subsistir.

Algunos comercios se dedicaban a exportar a Bolivia ciertos productos, pero ahora ello les resulta imposible por las variaciones del dólar en Argentina. Lo cual significa que ellos no puedan trasladar parte de esas ganacias que obtenían, para “subsidiar” algunos productos que vendían al mercado local.

Una situación importante es que hasta que estuvo el gobierno nacional anterior, la Cámara comercial mantenía una línea de trabajo con la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca (de la Nación). Pero desde que asumió Javier Milei ello es inexistente; tanto es así que no ha sido designada ninguna autoridad.

Desde Salvador Mazza hasta el año pasado se exportaba a Bolivia, cereales, como trigo y maíz, harina y arroz (se aprovisionaban de mercadería del centro y noroeste del país). Pero ello se encareció por los valores del dólar y del transposte (ante los aumentos de combustibles).