Vie. 26. Jul 2024, Santa Fe - Argentina
Opinión

DIANA MONDINO, LA ESPOSA (Y SOCIA) DE QUIÉN...? (Especial)

DIANA MONDINO, LA ESPOSA (Y SOCIA) DE QUIÉN...? (Especial)

CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA (Especial para PrensaMare)  Pocos saben que Eugenio Isaac Pendás, es el cónyuge y socio de la canciller Diana Mondino.

Se trata de un ‘economista’ que tuvo un pasado por el Banco Central cuando se produjo una de las más recordadas y nefestas maniobras fraudulentas de la historia bancaria argentina.

Nos referimos a la quiebra del Banco Integrado Departamental (BID). Un suceso que en su tiempo generó pérdidas por... 1.000 millones de dólares, en los años ‘90.

Por aquellos años de gobierno de Carlos S. Menem, el CEMA (un think tank neoliberal) era el encargado de proveer de ‘pensantes’ y ejecutores a dicha gestión. En 1991, Roque Fernández (ex presidente del Banco Central y luego Ministro de Economía), designó a Pendás como Superintendente de Entidades Financieras del Banco Central.

Cinco años más tarde, Fernández se fue a Economía, para hacerse cargo de la Secretaría de Programación Económica (hasta 1997), y luego la Secretaría de Obras Públicas. Pendás, renunció a esta Secretaría (en marzo de 1998), y 2 meses después se sumó al Directorio de Papel Prensa SA (controlado por los grupos Clarín y La Nación).

En esos tiempos...

El Banco Integrado Departamental (BID), nace como entidad financiera privada el 30-11-1978 con sede en Venado Tuerto (provincia de Santa Fe). Un año más tarde (tras producirse una fusión de 11 entidades de cajas de crédito), fue habilitada a operar comercialmente; tiempos en que las cajas eran obligadas a transformarse en bancos cooperativos (por disposición de la Ley de Entidades Financieras).

Una investigación de la Comisión...

Especial de la Cámara de Diputados (que investigaba hechos ilícitos relacionados con el lavado de dinero) dio a conocer un informe sobre la situación del BID. Se indicó que a partir de 1993, los directores, accionistas y algunos funcionarios de ese banco, llevaron a cabo principalmente préstamos irregulares a empresas vinculadas a la entidad financiera.

Pero también se comprobaron otras prácticas ilícitas, como maniobras para evitar previsionar, operaciones destinadas a crear activos falsos, obtención de fondos del Banco Central mediante información fraudulenta y transacciones ilícitas en el marco de la ALADI...

En julio de 1994...

El BID entró en estado de cesación de pagos y casi 10 meses más tarde el Banco Central (que conducía Fernández, la Vicepresidencia de Pedro Pou y de Pendás como Superintendente de Entidades Financieras), ordenó la suspensión de actividades. Lo que implicó la imposibilidad para los ahorristas de retirar sus fondos y para los jubilados percibir sus pensiones.

En ese momento, el BID absorbió 2 bancos cooperativos (el ACISO y el de la Ribera). Según declaró Roberto Cataldi -Gerente General del BID-, el banco fue obligado a fusionarse “bajo intimidaciones y resoluciones del Central”.

Expresó a la prensa que Pendás les pedía “por favor” que lo hicieran y que “si no aceptaban firmar la nota de pedido de suspensión ellos hacían una denuncia justo un día antes de la aprobación de la garantía de los depósitos”.

El 15-2-1995 se produjo la fusión con la aprobación del BCRA que respaldaba la operación con el propósito de “salvar a estas entidades” mediante la unión.

Para ello, el informe del Banco Central destacaba la viabilidad operativa de la fusión y resaltaba la "solidez financiera" del BID. Quien más insitió para que el BID absorviera a los dos bancos fue Eugenio Pendás.

Para recomendar esta unión financiera, Pendás se basó en un documento realizado por la calificadora de riesgo argentina Risk Analysis.

Y quién era la titular de dicha calificadora...? Nada más y nada menos que su cónyuge, Diana Mondino. Su empresa se había encargado de otorgarle al BID una “triple B”; lo que significaba una... calidad crediticia buena.

Al producirse la cesación de pagos...

El Banco Central le otorgó un total de 171 millones de pesos en concepto de redescuentos. Pero un año más tarde, el juez de Venado Tuerto, Marco Ferraroti, decretó la quiebra del BID.

Consecuencia de ello, se produjeron pérdidas por 1.000 millones de dólares; alrededor de 400 de desfalco a los ahorristas; y un perhuicio al Banco Central de 320 millones verificados.

De nada valieron las protestas, las acciones judiciales, las denuncias y los reclamos de ahorristas, trabajadores y damnificados. Inclusive esas expresiones llegaron hasta la Ciudad de Buenos Aires, frente al Banco Central.

Fue allí que Matilde Sermonetta...

Representante del comité de acreedores, expuso que se estaba ante "la estafa más grande desde la crisis del tequila". Los responsables estaban en el (desaparecido) BID, como en la conducción del Banco Central de la República Argentina (BCRA); y en este sentido, Pendás estaba incluido en la maniobra.

Era posible que quienes ejercían el control del BID no se percataran de su insolvencia...?

Estos funcionarios protegían el sistema financiero...?

Actuaron responsablemente al no adoptar medidas de precaución...?

Cómo fue posible que habiendo suspendido el funcionamiento del BID, los mismos que lo habían llevado a esa situación continuaron al frente y terminaron con un planificado vaciamiento que se extendió por un año...

Lo que ocurrió después...

Es propio de las maniobras del poder financiero: La causa pasó de despacho en despacho judicial, para terminar con su prescripción en 2009 (transcurrieron 14 años... y nada).

En quienes tuvieron ‘algo’ que ver (si n resolver en favor del Estado y de los perjudicados particulares), se contaron: Claudio Bonadio (dispuso el procesamiento y detenciones de algunos directivos del BID); Rodolfo Canicoba Corral; Julián Ercolini (se declaró incompetente y determinó que la causa debía continuar en la justicia de Venado Tuerto...).

En 2005, la Sala I de la Cámara Federal porteña confirmó los procesamientos de los banqueros Roberto Cataldi, Miguel Arduino, Juan Bautista Melfi, Luis Martínez Rial y Gustavo Machado (por los delitos de asociación ilícita y administración fraudulenta); Otros nueve acusados fueron confirmados por este último delito. Pero las imputaciones contra funcionarios del Banco Central quedaron prescriptas...

La nota de color de esta estafa fue que los ahorristas pudieron cobrar la mayor parte de la deuda inicial... claro que en pesos.