KARTUM-SUDAN  (PrensaMare)  La pena de muerte (o la cadena perpetua), parecen ser el futuro del expresidente sudanés Omar al Bashir, acusado de minar el sistema constitucional para hacerse con el poder.

Se ha creado un comité para investigar el papel del entonces general al Bashir y el de otros colaboradores en la interrupción del orden constitucional con el golpe de estado.
Dicho grupo de investigación tendrá facultades de acusación pública y está investido de autoridad para citar e interrogar a cuantas personas entienda pertinente.
Al Bashir llegó al poder en 1989 gracias a un golpe militar contra el presidente Sadiq al Mahdi con el apoyo de personalidades y grupos afiliados a la Hermandad Musulmana. Lo acusan, además, de violaciones de los derechos humanos y de genocidio en los conflictos de Darfur y con los separatistas de Sudán del Sur.
Desde 2019…:  está encarcelado y acusado por La Corte Criminal Internacional de dirigir asesinatos en masa, violaciones sexuales y saqueo en Darfur a través de las acciones de la milicia Janjawid.
Fue depuesto por un golpe castrense el 11-4-2019 después de más de cuatro meses de violentas protestas populares en demanda de su deposición y al calor de la grave crisis económica que atraviesa este país africano.