SANTA FE-ARGENTINA (PrensaMare) Cuando Colón no anda bien futbolísticamente o cuando –como ahora- marcha bien, las noticias que empañan a la entidad son sus constantes conflictos internos.
Al parecer, la dirigencia colonista no puede estar ‘tranquila’ y necesita estar permanentemente confrontando. O son las renovaciones de contratos o la falta de pago a los jugadores; o llamativas acciones vandálicas o no cumplimiento de contratos; o fricciones constantes –como en este caso- con los empleados…
En el partido anterior (ante Central Córdoba), no fueron convocados los trabajadores de rama por reunión (los que atienden las puertas del estadio y boleterías en los partidos) y se llevó adelante todo el trabajo con los mensualizados.
Este sábado por la mañana (día en que se jugaba con Defensa y Justicia), ninguno fue fue convocado para efectuar el hisopado y por lo tanto se elaboró un comunicado en el que se informó que, al no recibir comunicación, cerraron las puertas y se retiraron de la institución a las 10 de la mañana.
Dichos trabajadores se ocupan de abrir las puertas, la colocación de redes, el pintado de la cancha y todos los trabajos de plomería y electricidad.
Un club de Primera divisional puede justificar el convivir siempre con el choque, el disgusto, el destrato…?