EL DOLOR DE CARLOS TEVEZ
CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA (PrensaMare) La prensa amarillista decía que Carlos Tevez había sido sacado del equipo titular que debía jugar en San Juan la final de la Copa Maradona, ante Banfield.
Lo criticaron y hablaron –como siempre- demás, y sin saber.
Fue verdad que él no viajó con el plantel y se sumó luego; y que no fue titular, sino que ingresó posteriormente.
Lo cierto es que Tevez atraviesa una situación personal dolorosa, ante el difícil transe de la salud de su padre. Tras el partido donde se consagró campeón declaró: "Lamentablemente, mi viejo no tiene posibilidades… Hable el viernes con Miguel (Russo) cuando nos pasaron el parte médico, se lo expliqué y sentí que tenía que ser padre con mis hijas y explicarle la situación que está pasando su abuelo", contó.
"Él lo entendió y pude venir el domingo por la mañana. Mi madre está devastada, tenía que levantarme rápido, encontrar el tiempo para llorar y estar hoy con la camiseta de Boca. Mi vieja me pidió que jugara y lo hice", agregó.
Ingresó en el minuto 83’ en lugar de Ramón Ábila y asumió la responsabilidad de ejecutar el primer penal de la tanda consagratoria. A los 36 años, el delantero logró su undécima estrella con Boca y llegó a 29 conquistas en toda su trayectoria. Es el segundo argentino con más títulos (detrás de Lionel Messi con 39).
Para quienes lo atacan a él y a Boca en estos días por su eliminación en la Copa Libertadores, Tevez con humildad y autocrítica declaró: "Lo del otro día nos dolió mucho pero estamos de pie otra vez. Con Santos no faltó rebeldía para correr, sino que faltó rebeldía para jugar, para agarrar la pelota. Esa fue la falla más grande que tuvimos". No existe drama; el único drama es el de la situación particular con su padre.