LA PLATA-ARGENTINA  (PrensaMare)  Mientras Argentina sigue afrontando una terrible pandemia, desde la alianza Juntos para el Cambio hace meses que están lanzados mirando las elecciones legislativas de 2021.

Las peleas dentro del PRO se llevan todas las miradas, ante un socio como la UCR (Unión Cívica Radical) que no tienen en cuenta, ni propios ni extraños.

No es para menos: se trata de un partido en oferta y liquidación.

Pero como el grupo Clarín no descansa, ya hizo que su candidato elegido –Facundo Manes- picara en punta…

En la provincia de Buenos Aires, el macrismo afronta una disputa que no permite el descanso de ninguno de los principalísimo interesados. Es lo que le sucede a Maria Eugenia Vidal, a Horacio Rodríguez Larreta, a Jorge Macri, a Diego Santili, y a Emilio Monzó. Como si ello fuera poco, el titular nacional de la UCR, Alfredo Cornejo, reclamó que el n° 1 en la lista de diputados nacionales de Juntos por el Cambio, le corresponde a… Manes.

Desde el grupo Clarin no pierden el tiempo y comenzaron a marcarle la cancha al macrismo, entendiendo que ni Vidal ni Santilli podrían garantizarle un triunfo ante el peronismo bonaerense.

En ese sentido, el neurocientífico Facundo Manes es la persona que garantiza mejor los intereses clarinetistas. La idea de éstos es la de comenzar a instalar ante la sociedad que Manes es un candidato “no político”, un “científico”, una “prenda de unidad”, teniendo en cuenta que los tironeos del macrismo son múltiples.

Por un lado están los que le reclaman a Vidal que sea candidata (mientras ella quiere encabezar la lista en Ciudad de Buenos Aires). Otros dicen que el candidato en suelo bonaerense debe ser Diego Santilli (lo que no quieren ni Jorge Macri ni Monzó). A su vez, la denunciadora serial Elisa Carrió se ofreció a ser candidata, pero solo si es la n° 1 (con respaldo de Vidal y Larreta…?).

Lo que quiere imponer Mauricio Macri (y Patricia Bullrich) es lista de unidad. Claro que para ello, quien designará a los candidatos será… él (¡). Pero como son cada vez más los díscolos que no aceptan este dedazo, se ha dejado abierta la posibilidad que si no se produce unidad, se deberá concurrir a las elecciones Paso.

Desde la UCR y con la idea de Clarín, apuestan a que la candidatura de Manes pueda ser mostrada y ofertada como la de una persona que aporta “aire nuevo” a la política (¿?). Inclusive hablan de utilizar el término “renovación” para fortalecer la candidatura de quien es –en verdad- un verdadero dinosaurio de la política.

Inclusive Cornejo salió a sustentar este pensamiento expresando: "No ha estado en el Gobierno de Cambiemos. No tiene trayectoria política muy definida, pero tiene ideas muy claras. Encabezar la lista con él sería importante".

Este dirigente -Cornejo-, que denosta al Gobierno de Cambiemos, se olvida (se olvida?) que los radicales formaron parte de dicho gobierno; les guste o no.

También debe recordar que en las preparatorias de listas de diputados del 2019, Clarín negoció (desde adentro de la UCR) para ubicar a Manes en una lista, pero al no aparecer como un n° 1, se retiraron.

La pregunta que se hacen los macristas es si en verdad el novísimo titular de la UCR bonaerense, Maximiliano Abad, está al corriente de esta maniobra clarinetista…

Ante este panorama, Jorge Macri –que quiere ser candidato a la gobernación en el 2023-, ya dio el aviso que se opondrá de plano a que Santilli ‘aterrice’ en suelo bonaerense. Pero hábil y con excelentes relaciones con Clarín, ya dio su “visto bueno” para que Manes sea el n° 1 “de la unidad” opositora bonaerense.

Juntos por el Cambio se ha transformado en una licuadora donde se mezclan intereses de porteños y bonaerenses, con un  Macri que todavía no sabe si ser n° 1 en Ciudad de Buenos Aires (para garantizarse fuero). Y que –si él no es candidato-, pretende imponer a Patricia Bullrich como la n° 1 porteña.

Pero como Clarín siempre hace apuestas múltiples entre sus empleados, ya tiene instalado que si lo de Manes “se cae”, tienen a Carrió como su otra carta en juego.

Dentro de todas estas disputas –sin interesarle en absoluto el drama del coronavirus porteño, bonaerense y nacional-, los macristas se preguntan qué hará Monzó, que cada vez va quedando más relegado.

Ocurre que él aspira a ser candidato a la gobernación en el 2023. Para ello ‘necesita’ imperiosamente integrar la lista de diputados en suelo bonaerense. Lo problemático para él es que Carrió no lo quiere; Jorge Macri ya dijo que no tiene nada que ver con su espacio; a Cristian Ritondo no le interesa su cercanía porque él también tiene aspiraciones para el 2023.

Como se puede observar quien mejor tiene en claro sus intereses dentro de la sociedad neoliberal / derechista, es el… grupo Clarín.