DOHA-CATAR (Especial para PrensaMare) Casi sin imaginarlo (por muchos), Argentina llega a una nueva final mundialista. Tras un arranque con caída (2-1) ante Arabia Saudí, el equipo se repuso y fue sumando victorias y en semifinal superó merecidamente a Croacia por 3-0.
Partido claramente dividido en dos. Los primeros 30 minutos con Croacia manejando el partido, jugando en campo argentino, pero sin generar situaciones de gol. Lo cual era una buena señal para Argentina.
Siendo superada, sin controlar el balón y debiendo jugar en su campo, su rival no había podido sacar ventaja.
Fue así que apenas pasada esa media hora, gran habilitación para Alvarez (A), que entra al área y choca con el portero. Penal. Penal...? Si; el juez así lo entendió, cuando –siendo un deporte de contacto- el delantero argentino entro buscando el balón y el portero croata salió a interceptarlo; chocan, y el mismo portero cae hacia atrás, porque Alvarez llevaba más fuerza.
Lo cierto que Messi (A) lo transformó en gol. No habían pasado 5 minutos, cuando Argentina se defendía en su área y se generó un espectacular contragolpe, que Alvarez (A) lo finalizó en un nuevo gol. Golazo, por la rapidez y resultado, y 2-0.
A partir de allí los croatas se descontrolan futbolísticamente. Sintieron el golpe del resultado negativo en tan pocos minutos y perdieron el orden. Salían mal a marcar; corrían detrás de los argentinos: no hilvanaban jugadas. Así se fue la etapa inicial.
En el complemento, la obligación era de los perdidosos, quienes buscaron mantener el buen juego, la llegada a través de buen juego, pero sin inquietar al portero argentino, salvo algún disparo de lejos (bien neutralizados).
Se pasaban los minutos y cada vez se hacía más seguro el triunfo argentino y la imposibilidad rival por acortar el resultado. Hasta que de un lateral en el medio campo, habilitan a Messi (A) -por la punta derecha-; arrastra a su marcador, lo va llevando, aguanta la marca y presión y termina su corrida con un pase-gol, para que Alvarez (A) anote nuevamente.
Iban 24 minutos el complemento y partido terminado. Croacia continuó con sus intentos (tibios); Argentina siguió buscando aumentar; llegaron los cambios; y así se cerró una semifinal entretenida, donde quedaron para destacar:
· Gran encuentro de Messi (A) con apariciones contundentes
· Muy buen trabajo para el equipo, e individual de Alvarez (A)
· Parejo partido de Tagliafico (A) que aportó marca y desequilibrio
· Poco de Modric (C), teniendo en cuenta lo que él puede aportar
· Nueva gran faena de Otamendi (A) en el fondo
· Muy buen partido de Kovacic (C)
· Pareja tarea de Paredes (A).
Para destacar que nuevamente Argentina fue local, con el apoyo incondicional de decenas de miles de argentinos que constantemente alentaron al equipo.