SANTA FE-ARGENTINA  (PrensaMare)  "Comparezco para comunicar mi dimisión y la de la junta directiva. Es una decisión meditada, serena y acordada por todos mis compañeros".

De esta forma quien era el presidente del catalán Barcelona, Josep Bartomeu, comunicó su alejamiento del cargo del club, junto a la directiva.

Sorpresivo? No. Inesperado? No.

Su salida es la consecuencia de todos sus desaciertos, autoritarismo, incapacidad, torpezas, ineptitud y desprecio. Carente de proyecto deportivo llevó al Barcelona a su actual situación deportiva. Generó el enfrentamiento de los jugadores con la directiva. Fue responsable de la decisión de Lionel Messi de pedir su salida. Demostró su total desagradecimiento para con quien hizo grande -a nivel mundial-, al club.

Merece el análisis este alejamiento? No… En absoluto

Para qué hablar, hipotizar o especular con temas que solo los directamente interesados deben conocer con precisión y que terminó en este desenlace. Por otra -y en definitiva-, es un tema que deben resolver –en el club-, los socios por un lado, y los simpatizantes por otro.

Bartomeu ha sido demasiado mediocre como para dedicarle más espacio.