Lun. 18. Mar 2024, Santa Fe - Argentina
Economía

“AL FONDO A LA DERECHA…”

“AL FONDO A LA DERECHA…”

Otro año difícil para los argentinos...

SANTA FE-ARGENTINA  El 2019 arrancó con todo. Porque el último año del mandato de Mauricio Macri trajo la novedad del 47,6% de inflación anual para 2018. Y una proyección para el 2019 del 20,2%, según el FMI (que auguró no-reactivación y más desocupación…), al 30% de analistas privados.

Ocurre que el regreso al mandato del FMI no es gratuito; por lo menos para el país y el grueso de la población. La consultora Ecolatina afirmó que la deuda argentina ya supera los 300.000 millones de dólares. Lo que significa que se elevarán sustancialmente los pagos de intereses de deuda (respecto al PBI). Un tema no menor, pues ello solo será posible en tanto y en cuanto se produzca una mayor reducción del gasto público.

El Ministerio de Hacienda ha informado que la deuda pública bruta alcanzó U$S 308.000 millones al terminar el tercer trimestre de 2018 (ya se están en el… 95,4% del PBI).

De esta forma, según la citada firma analítica, “el pago de intereses saltará de 16,4% en 2018 a 18,2% este año, su peso sobre el PBI trepará de 3,1% -el año pasado- a 3,6% en 2019; de este modo, más que duplicará al valor heredado, ya que en 2015 dicho cociente se había ubicado en 1,3%”.

“El gasto primario caerá desde 24% del PBI en 2015 a 19% este año. En consecuencia, el gasto público total habrá caído alrededor de 3 p.p. del producto, al pasar de 25,3% en 2015 a la zona de 22% este año”.

La forma en que Macri ha atado los pagos al FMI hacen que en 2022 y 2023, Argentina deberá devolverle casi U$S 45.000 millones al organismo. Lo que al ritmo de la economía actual (y la futura, que empeorará), resulta totalmente imposible asumir esos pagos con fondos propio.

Y entonces…? Habrá que recurrir a tomar más préstamos; a ajustar más; a vender lo que el FMI exija. No queda otra. A menos que se decida un default.

Con estos datos se observa claramente que ya el próximo mandatario argentino está condicionado por el FMI. De allí que se entienda la buena letra que prometen ciertos políticos, tanto del peronismo como del oficialismo y/o del opo-oficialismo, para presentarse como creibles y confiables para dicho poder internacional.