Mar. 19. Mar 2024, Santa Fe - Argentina
Opinión

EN HOMENAJE A MIS 14 COMPAÑEROS... (Hugo Crosatto)

EN HOMENAJE A MIS 14 COMPAÑEROS... (Hugo Crosatto)

CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA  (por Hugo Crosatto)  En homenaje a mis 14 compañeros detenidos desaparecidos de Mercedes Benz Argentina.

En el año 1971 ingresé como operario en la multinacional Mercedes Benz, gobernaba el país la dictadura cívico-militar que tenía al mando al general Alejandro Lanusse, en el sindicato SMATA (Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor) estaba como secretario general Dirk Kloosterman y José Rodriguez como secretario adjunto, fundadores de la lista verde, Kloosterman era también vicepresidente de la FITIM (Federación Internacional de Trabajadores de la Industria Metalúrgica) desde el año 1969.

Al poco tiempo de ingresar fui conociendo a compañeros que como yo tenían idea de trabajar sindicalmente, cosa que era bastante difícil por el poder que la lista verde pudo desarrollar a partir del despido de una comisión interna honesta, representativa y clasista en el año 1969.

En el desarrollo de la lucha que emprendimos de la que formaba parte un abanico de distintos partidos políticos con los que acordamos que lo importante no era la pertenencia partidaria, si que fuera un movimiento democrático, plural y clasista.

Así fuimos avanzando hasta llegar a las elecciones de delegados y comisión interna en el año 1973, este triunfo se logró después de una lucha que tuvimos que realizar con el tema de adonde se abrirían las urnas para hacer el conteo de votos.

Para este momento ya manejaba al sindicato José Rodriguez ya que Kloosterman fue muerto en un atentado.

Hasta esa elección los burócratas del SMATA se llevaban las urnas y traían los resultados otro día, por supuesto siempre eran elegidos sus candidatos, en esta oportunidad los obligamos a abrir las urnas una vez finalizado el acto eleccionario en cada sección, les ganamos en todos los sectores por amplia mayoría.

A partir de ese momento la lista verde comenzó a trabajar para desacreditar, perseguir, amenazar a los compañeros elegidos, esta comisión interna le presento a la empresa 50 puntos para discutir y resolver, la empresa que no tenía ningún interés de manejarse con trabajadores a los que no podía manejar se puso de acuerdo con los burócratas para descabezar al movimiento de los trabajadores que avanzaba a pasos agigantados.

Este accionar de los burócratas y la empresa les dio sus frutos, y para fines de 1974 nos dejaron sin comisión interna, a partir de ahí nombraron dos interventores, Aguiar y Selles para representarnos, demás está decir que no servían para nada, eran verdaderos burócratas que representaban y defendían los intereses de la empresa.

Gobernaba el país el justicialismo que en el año 1973 había firmado con la CGT y la CGE (Confederación General Económica) el pacto social que básicamente suspendía por dos años los aumentos de precios y los salarios, esto se cumplió a medias ya que lo único que no se aumento fueron justamente los salarios.

Así arribamos al año 1975, para Junio y Julio que finalizaba el plazo del pacto social y se abrían nuevamente las discusiones paritarias, nosotros seguíamos intervenidos, para la discusión con la empresa propusimos a los compañeros que nos representarían pero no solo que no fueron aceptados sino que la empresa los despidió con los dos interventores que ni se dieron por enterados.

El movimiento siguió trabajando, publicamos volantes firmados como C.R.O.E.M.B.A (Cuepo de Representantes de Obreros y Empleados de MBA), el malestar en la base aumentaba permanentemente porque los problemas en la planta no se solucionaban, el salario caía sin descanso y para rematar el SMATA firmó el convenio colectivo con MBA (Mercedes Benz Argentina) a nuestras espaldas.

El trabajo nuestro que era por demás peligroso ya que funcionaba libremente la AAA (Alianza Anticomunista Argentina) que con la burocracia sindical y otro grupo que se llamaba Comando de Organización (CDO), eran la mano de obra que usaban las empresas pera perseguir a los trabajadores enrolados en el clasismo, grupos que estaban infiltrados en la mayoría de las grandes empresas, sumados a los de las fuerzas de seguridad, fuerzas armadas y el servicio de inteligencia del ejercito, batallón 601, (todas las empresas tenían a algún miembro de los represores entre sus empleados (Generalmente en sus directorios o como jefes de seguridad como por ejemplo MBA, su jefe de seguridad se llamaba Lavallen, apropiador de Paula Logares, la primer nieta recuperada por Abuelas, a cargo de la Sub-Comisaría de San Justo, lugar por el que pasaron nuestros 14 compañeros detenidos-desaparecidos).

Este convenio acordado entre la burocracia del SMATA y MBA decía en el artículo 29 que la empresa le daba al SMATA el 1% de su facturación a las concesionarias para entre otras cosas, “Eliminar a los elementos negativos”, esto es prueba fehaciente de que las empresas comenzaron a financiar a los represores mucho antes de producir el golpe civico-militar de Marzo de 1976.

Con estos problemas llegamos a Octubre de 1975, firma del convenio sin consultar a la base, despido de los compañeros elegidos como paritarios, sin cuerpo de delegados ni comisión interna, libre accionar de los grupos antes mencionados (AAA, CDO, Fuerzas Armadas y de seguridad etc), persecución de activistas, delegados y comisiones internas clasistas.

El 8 de Octubre (Fecha que no fue elegida al azar, ya que un 8 de Octubre había caído herido en combate Ernesto Che Guevara en Bolivia, y era para nosotros como que caído El Che levantábamos su bandera de lucha para llegar al socialismo en nuestra Latino-América, para eso se luchaba en aquellos años) realizamos una asamblea para exigirle a los interventores elecciones, al mismo tiempo se decide la huelga de brazos caídos y hasta tanto el gremio de elecciones nombrar a una comisión interna de 9 miembros que represente al personal.

La respuesta del gremio como era de esperar fue negativa y por supuesto no reconocer a la comisión elegida en asamblea. La comisión interna de 9 miembros estaba formada por los compañeros:

Barreiro, José

Cano, Alfredo

Crosatto, Hugo

Estivill, Eduardo

Ferro, Telmo

Hernandez, Pablo

Mazzuco, Daniel

Portnoit, Daniel

Ventura, Victor

Durante los primeros días de huelga podíamos ingresar a las plantas, pero el día 15 a 117 trabajadores la empresa nos impidió el ingreso, estábamos despedidos, el personal ingresado decidió que la lucha era con los 4000 adentro, o los 4000 afuera, y comenzaron a salir hasta no quedar nadie adentro, como los que estábamos afuera éramos del turno mañana se nos agregaron con el correr de las horas los del turno intermedio y turno tarde.

A partir de ese día nos quedamos en un terreno enfrente de fábrica y comenzó otra lucha, se organizó un fondo de huelga que llevaron adelante las compañeras de los trabajadores y compañeras trabajadoras, se organizaron movilizaciones al Ministerio de Trabajo comandado por Carlos Ruckauf (con el paso del tiempo nos enteramos que este fascista le exigía a la empresa despedir entre 350 y 400 trabajadores en complicidad con el SMATA), tuvimos el día 22 el apoyo del comercio de Cañuelas y Gonzalez Catán que cerraron sus puertas en apoyo a la huelga, tuvimos reuniones en el Congreso con diferentes políticos que no dieron resultado alguno, en una reunión con Victorio Calabró en ese momento gobernador de la provincia ( La AAA bajo amenaza de muerte había provocado la renuncia de Bidegain al cargo de gobernador, así fue que asumió Calabro que era el vice), Calabro nos manifestó que no podía intervenir para resolver el conflicto, solo nos prometió que no nos iba a mandar a las “fuerzas policiales para cagarnos a palos” (Textual), cumplió.

Como el gremio no se hacía cargo de nada y además nos quitó la cobertura social (Nos dejó sin cobertura de salud) decidimos ir nosotros, fuimos recibidos por Amín que nos dijo textualmente, “así como a ustedes los apoya la izquierda, a nosotros nos apoya la derecha, si yo levanto el teléfono mañana ustedes son todos boleta, pero en esa no vamos a entrar ya que si tocamos a uno de ustedes nos van a tocar a uno de nosotros”, de la única manera que podemos hacernos cargo, es que vuelvan a trabajar y dejar sin efecto a la comisión que además no esta reconocida por el gremio y tampoco la puede reconocer la empresa.

Nos retiramos con la firme convicción que la lucha será encarnizada como lo suponíamos, volvimos a fábrica y la Asamblea decidió por unanimidad continuar la medida de fuerza a pesar de la declaración de ilegalidad impuesta por el facho Ruckauf.

Recibimos un apoyo total de diferentes fábricas con las cuales conformamos la Coordinadora de Zona Oeste, y del interior del país como de la lista Marrón clasista de Córdoba (Con la que teníamos total afinidad).

El día 30 de Octubre fuimos en manifestación a la casa central de MBA, estaba en esos años en Av. Del Libertador 2400, en la reunión que realizamos con D’Elias que era el presidente del directorio, le ganamos la lucha, le arrancamos la reincorporación de todos los despedidos, el pago de los días de huelga, el reconocimiento de “Los 9” y el cuerpo de delegados, un adelanto de una suma importante y la garantía de no producir despidos.

Como el grupo los 9 comenzamos a trabajar en los puntos que no se resolvieron con la anterior comisión interna, uno que era muy importante para los compañeros se refería a la recategorización de todos los puestos de trabajo, concluido este se cobró la diferencia a partir del año 1974 que fue donde dejó la discusión la CIR de ese año, pasamos a todo el personal fuera de convenio a pertenecer a MBA, leche y barbijos a los sectores que podían contraer Saturnismo, bajamos las horas de tratamiento térmicos por ser trabajo insalubre, mas micros para el personal, comedor a cargo de fabrica, examen médico a todo el personal, etc.

Para Enero-Febrero del 76 debido a que la inflación se devoraba los salarios, le pedimos una reunión al directorio para discutir un aumento salarial, la empresa nos pidió discutir el tema en base a un aumento de la producción, nuestra respuesta fue que, si querían más producción nosotros podíamos pensarlo sobre la base de tener participación en las ganancias.

Se sucedieron las reuniones para resolver el problema, antes de poder llegar a lograr un acuerdo se produce el golpe cívico-militar de Marzo.

Hay un hecho que se puede catalogar de heroico y no está difundido como debería, en Abril de 1976 (Ya producido el golpe) entran militares a planta y se llevan a un compañero, Juan José Martin, como comisión interna hacemos responsable a la empresa por lo que le pudiera suceder al compañero y salimos a buscarlo, recorrimos comisarías de González Catán, Cañuelas, San Justo sin resultados, decidimos entonces ir al regimiento 3 de La Tablada, salimos de la reunión con el coronel que nos atendió que nos dijo que no había orden alguna de ningún organismo del gobierno de detener a trabajador alguno.

Por supuesto no le creímos, ya que por datos de los compañeros del sector de Martín no había duda, eran milicos, al volver a fábrica y consultar a la base se resolvió ir en manifestación al regimiento 3, así lo hicimos y a los pocos días Martín fue liberado.

Debido a que la empresa quiso imponer como aumento de salario que solicitamos un premio a la producción (Nos costó mucha lucha eliminar todo premio en el salario) dejando en el olvido las reuniones de Enero-Febrero, y como la situación en todo el país era de una sangrienta represión, no nos quedo margen para resistir el embate empresarial sin poner en riesgo a los compañeros. La propuesta de la empresa la rechazamos sin dudar y los emplazamos a retirar esa forma de resolver el problema salarial. Debido a que los golpistas prohibieron todas las actividades sindicales y cómo no íbamos a firmar un acuerdo sobre el aumento de la producción, renunciamos, esto fue en Mayo del 76. Para Julio de ese año junto a dos compañeros, renunciamos a la fábrica.

Lo que vino después fue la represión que terminó con 14 compañeros detenidos desaparecidos.

Este es un pequeño resumen de la lucha que llevamos a cabo en la Mercedes Benz, hay muchísimos datos que por no hacer tan extenso y cansador al relato los deje al margen para otra oportunidad.

Hoy muchos compañer@s estamos agrupados en “Trabajadores y Delegados de Los Años 70” para seguir impulsando los juicios contra todos los aparatos represivos y los civiles que a través de las empresas fueron en conjunto quienes secuestraron, asesinaron, robaron, apropiaron a l@s nacid@s en cautiverio en Campo de Mayo, por donde pasaron nuestros 14 compañeros que forman parte de la terrible cifra de 5.000 que desaparecieron en ese campo de concentración.

Las fábricas multinacionales se enriquecieron tomando préstamos a la banca internacional y la está pagando el pueblo argentino como parte de la deuda externa.

Como reflexión final quiero dejar claro que las trabajadoras y los trabajadores de aquellos años sabíamos porque luchábamos, luchábamos contra la explotación, por la defensa de los recursos, por reforma agraria, nacionalizar la banca, por derechos humanos que tengan en cuenta la niñez, salud, educación, vivienda, atención a los mayores, etc, y por el Socialismo.

(Hugo Crosatto).