No se detiene el desprecio al semejante...

NUEVA YORK-EEUU  (PrensaMare)  El presidente Donald Trump promulgó el proyecto de ley fronterizo de 4.600 millones de dólares aprobado por el Congreso, y una delegación liderada por el Bloque Hispano del Congreso visitó 2 prisiones de inmigrantes.

Los allí detenidos sufren condiciones inhumanas generadas por las políticas de Trump en la frontera. El congresista de Texas Joaquín Castro describió las condiciones observadas en un centro para adultos como similares a las de una prisión, donde las mujeres son retenidas en celdas sin agua corriente y sin acceso a una adecuada atención médica.

Algunas llevan más de 50 días presas; otras denunciaron no tener información del paradero de sus hijos, de quienes fueron separadas.

La delegación del Congreso visitó también la estación de la Patrulla Fronteriza (en Clint, Texas) donde se denunció hacinamiento y las condiciones inhumanas que enfrentan los menores detenidos allí.

La congresista Alexandria Ocasio-Cortez (foto) publicó en Twitter: “No se trata solamente de los niños. Se trata de todos. Personas que beben agua de los inodoros, oficiales que se ríen frente a integrantes del Congreso. Lo denuncié a sus superiores. Y dijeron que ‘los oficiales se encuentran bajo presión y no se comportan apropiadamente a veces’. Nadie rinde cuentas por sus actos”.

Los integrantes del Congreso dieron una conferencia de prensa luego de la visita a la prisión de menores de Clint. La congresista Ayanna Presley, expresó: “¡Sigan abucheando Esto es muy apropiado: discurso vil para acciones viles, discurso lleno de odio para comportamientos llenos de odio, palabras racistas y venenosas para políticas racistas. Muy pertinente. Esto va más allá de un debate sobre financiación y más allá de todos los discursos que damos en la Cámara de Representantes. Se trata de preservar nuestra humanidad, y se trata de ver en cada una de las personas que están allí a un miembro de nuestra propia familia. Estoy cansada de que la salud y la seguridad, la humanidad y las plenas libertades de los menores de color sean negociadas, puestas en riesgo y moderadas. Necesitamos un sistema que funcione, que sea humano, que muestre compasión y que mantenga a las familias unidas”.

Recientemente, un juez federal determinó que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza deberá permitir el ingreso de inspectores de salud independientes a los centros de detención de Texas en los que se encuentran detenidos migrantes menores para garantizar que existen las condiciones “sanitarias y de seguridad” adecuadas.