LA PLATA-ARGENTINA  (PrensaMare)  La mala gestión con residuos agroquímicos llevó a que la provincia de Buenos Aires aplique multas a las multinacionales Bayer, Atanor, BASF, Monsanto, Dow Dupont, y Syngenta, entre otros, por un total de $ 783 millones.

Según una ley nacional, las empresas deben recuperar los envases de los productos agroquímicos que venden en el mercado, y se comprobó que en el 2020, ellas solo recolectaron el 8% de los envases (que pusieron en circulación).

Se trató de una de las sanciones más importantes en décadas, en el país. La aplicó OPDS (Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible), donde el Director Ejecutivo es Juan Ignacio Brardinelli.

El informe de dicho organismo indica que 71 empresas colocaron en el mercado bonaerense durante 2019 más de 13 millones de envases de plástico y otros materiales. Según la Ley n° 27.279/16, dichas firmas están obligadas a recuperarlos (pues son residuos peligrosos para la salud humana y el ambiente).

La investigación demostró que esa ‘recuperación’ apenas alcanzó un 8% del total (un millón de envases).

Se sabe que al no recuperarse y otorgarle el tratamiento adecuado, tales envases son quemados, enterrados, ‘alimentando’ los residuos generales o domiciliarios o abandonados en el campo. Pero también se sabe que otros envases son vendidos ilegalmente a acopiadores o tratadores que no están habilitados.

Inclusive se ha denunciado que muchos de tales envases plásticos terminan en circuitos del reciclado, junto a los plásticos comunes; de esa forma, se produce la presencia de agroquímicos en productos elaborados con plástico reciclado.

Justamente estos últimos terminan siendo usados para fabricar diversos elementos de uso doméstico, o en manipulación hogareña. Lo cual termina produciendo –sin que muchos lo sepan-, múltiples impactos en la salud.

Debe conocerse que los restos de estos productos agroquímicos al no manejarse de manera correcta, terminan contamiando la tierra, las napas de agua, y los cursos acuíferos; además, a causa de la radiación solar se evaporan y surge la contaminación aérea, que luego termina depositándose con las lluvias.