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BONASSO DESPIDIÓ A ESTRELLA

BONASSO DESPIDIÓ A ESTRELLA

CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA  El escritor Miguel Bonasso ha despedido al eximio pianista y gran ser humano, Miguel Angel Estrella:

“Adios a un grande

Miguel Angel Estrella

En París, donde vivía desde hace muchos años, se nos fue el Chango Miguel Ángel Estrella. Un ser humano de calidad excepcional que supo conjugar distintas cualidades y ponerlas al servicio de los pueblos, con un nivel de compromiso tan intenso y amplio que le supuso ser secuestrado, torturado y finalmente encarcelado -durante dos años- por la dictadura militar uruguaya que usurpaba el poder en diciembre de 1977. En ese entonces Estrella ya era un gran pianista de fama internacional, que en vez de frecuentar los salones de la alta burguesía, había empleado su talento para llevarle Bach, Mozart y Beethoven, a los trabajadores de su natal Tucumán y para crear organizaciones de difusión cultural contrarias al modelo elitista imperante. En una entrevista que le hice hace muchos años me contó que el coronel uruguayo Nino Gavazzo (un genocida que torturó también en Argentina) lo amenazó con destrozarle las manos “para que no puedas más llevarle música clásica a la negrada”.

Lo que -por suerte- no habían calculado sus verdugos, es que el prestigio internacional alcanzado por el Chango movilizaría a grandes celebridades de la música como Yehudi Menuhin o Nadia Boulanger, que no solo abogaron por su libertad, sino que le enviaron al penal, perversamente llamado “Libertad” por los militares, un piano mudo para que no perdiera la digitación. La presión internacional logró finalmente sacar a Estrella de la prisión. Radicado en el París donde había afinado su formación musical, creó la ONG “Música para la esperanza” que elevó a nivel internacional su voluntad de  vincular la música “culta” con las grandes causas sociales como los derechos humanos.

Fue embajador argentino ante la UNESCO y embajador de “buena voluntad” de la misma ante el mundo. Actualmente dirigía la famosa Casa Argentina de París, aquella que durante la dictadura militar fue ocupada por los estudiantes que pusieron al frente a otro grande: Julio Cortázar. Todo un símbolo. El enlace en el recuerdo de dos figuras extraordinarias de nuestra cultura”.