Mar. 19. Mar 2024, Santa Fe - Argentina
Ámerica

LA INTERMINABLE ‘CRISIS’ DE HAITÍ

LA INTERMINABLE ‘CRISIS’ DE HAITÍ

SAN JUAN-PUERTO RICO  (PrensaMare)  Otra vez Haití es novedad. Aunque en verdad lo viene siendo dede hace décadas. Porque el poder occidental desea transformarlo decididamente en el “estado fallido”, y hacerlo desaparecer como tal, para volver a transformarlo decidida y desenmascaradamente en una colonia.

El gobierno haitiano renunció y el país tiene nuevo primer ministro, comunicó el cuestionadísimo presidente Jovenel Moise. El mismo agregó que el cambio tiene como objetivo abordar la grave crisis de seguridad que padece el país.

"La renuncia del Gobierno, que acepté, permitirá abordar el flagrante problema de la inseguridad y continuar las discusiones con miras a alcanzar los consensos necesarios para la estabilidad política e institucional de nuestro país", tuiteó Moise. La grave crisis institucional impuesta desde hace décadas ahora se ha cobrado al primer ministro saliente, Joseph Jouthe.

Había asumido en marzo de 2020, y lo sucede Claude Joseph, hasta ahora ministro de Relaciones Exteriores.

El tema ‘inseguridad’ al que se alude refiere concretamente al incremento de las bandas de secuestradores que extorsionan y recaudan dinero. Un accionar que posee notable grado de impunidad.

Lo cierto es que la sociedad (y la oposición política) reclama la salida del actual mandatario Jovenel Moise, al que responsabilizan de incapacidad, servilismo para con EEUU y corrupción. Su inestabailidad es tal, que desde que asumiera ya lleva su sexto primer ministro en 4 años de gobierno.

El territorio sirve de base operativa de bandas de narcotraficantes; crecen los secuestros extorsivos; aumentan los crímenes; se produjo una llamativa fuga de más de 400 detenidos de una prisión en las afueras de la capital, en febrero, que dejó 25 personas muertas.

A todo ello, la oposición ha denunciado que el mandato presidencial finalizó el pasado 7 de febrero, mientras que Jovenel Moise, afirma que el mismo concluye el 7 de febrero de 2022. La ‘diferencia’ de un año está en que Moise fue elegido en unos comicios anulados por fraude, y reelegido un año más tarde.

Sin funcionamiento del Parlamento activo, el mandatario gobierna por decreto, y es denunciado de “dictador”. En medio de su falta de poder y anarquía, el presidente organizó en junio un referéndum constitucional, denunciado como un engaño por la oposición.

En una muestra de desinterés y cinismo, el Consejo de Seguridad de la ONU reclamó a Haití, que sus preparativos electorales "se hagan con miras a unas elecciones presidenciales libres, equilibradas, transparentes y creíbles en 2021". Se trató por cierto de una declaración redactada por Estados Unidos.