Mar. 19. Mar 2024, Santa Fe - Argentina
Casos

FORD (PARTE CIVIL) DE LA DICTADURA

FORD (PARTE CIVIL) DE LA DICTADURA

Ya nadie podrá desconocer la complicidad empresarial...

CIUDAD DE BUENOS AIRES-ARGENTINA  El Tribunal Oral Federal n° 1, de San Martín, condenó a dos exempleados jerárquicos de Ford durante la dictadura (1976-1983).

Se trata del exjefe de Manufactura de la empresa, Pedro Müller, que recibió 10 años de prisión, y el exjefe de Seguridad de la planta, Héctor Sibilla (a 12 años).

Además, le aplicó 15 años de condena a Santiago Riveros, extitular de Institutos Militares del Ejército. Todos ellos encontrados responsables de los delitos de detenciones ilegales y tormentos agravados, ocurridos durante la última dictadura cívico-militar.  

La denominada causa Ford da cuenta de la existencia de un sistema de complicidad entre empresarios, personal jerárquico de la empresa, los militares gobernantes y el Ejército.

Se trata de un verdadero fallo histórico, pues ha quedado demostrada la necesaria participación de civiles en los secuestros y torturas contra trabajadores de la planta de Ford en General Pacheco

Las víctimas eran ‘levantadas’ (secuestradas) en camionetas de la firma multinacional y los torturaban e interrogaban en el mismo predio.

Fueron detenidos 24 trabajadores, que permanecieron entre 30 y 60 días desaparecidos en la planta de la empresa; tras ello, fueron puestos a disposición del PEN (Poder Ejecutivo Nacional).

El que hayan transcurrido tantos años para poder llevar adelante esta causa, hizo que no fueran juzgados Nicolás Courard (expresidente de Ford Argentina), y Guillermo Galarraga (exgerente de Relaciones Laborales), muertos en la impunidad.

Tras conocerse el fallo, el CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales) expresó: "El 7% de los civiles acusados por delitos de lesa humanidad son empresarios. La dictadura fue la oportunidad que vieron algunos directivos de empresas para resolver de manera represiva los conflictos laborales y aumentar sus ganancias. Pusieron a disposición de los militares recursos materiales, como autos e instalaciones, dieron listas de personas, y de esa forma pasaron a ser un eslabón más en la estructura del terrorismo de Estado".